Wagenknecht quiere meterse en el bolsillo a los ricos
El futuro partido de Sahra Wagenknecht no se fundará hasta la primavera de 2024, pero la política ya se está posicionando en términos de contenido. Quiere aumentar significativamente el salario mínimo y reclama un mayor compromiso de los que más ganan. Los trabajadores cualificados, por su parte, deberían verse aliviados de parte de la carga.
La ex política del Partido de Izquierda Sahra Wagenknecht se ha pronunciado a favor de un salario mínimo más alto y una fiscalidad significativamente mayor para las rentas y los patrimonios muy elevados. "Sería necesario un salario mínimo de 14 euros, que sigue siendo un salario muy bajo a los precios actuales", declaró Wagenknecht a la Redaktionsnetzwerk Deutschland (RND). El salario mínimo se sitúa actualmente en 12,00 euros. El año que viene, el salario mínimo aumentará a 12,41 euros, y después a 12,82 euros en 2025.
"La riqueza y las herencias de cientos de millones o incluso miles de millones deberían gravarse más para aliviar la carga de la clase media", ha declarado Wagenknecht, que ha anunciado la fundación de su propio partido. Además, el tipo impositivo máximo podría ser significativamente "más alto si afecta a las rentas reales más altas y no, como ocurre hoy, al trabajador altamente cualificado", añadió la diputada.
En el pasado, el tipo impositivo máximo, que ahora es del 42%, era del 56%. Sin embargo, sólo se aplicaba a un múltiplo del salario medio. Hoy, se aplica a una vez y media el ingreso medio. "Es absurdo", dijo Wagenknecht. También pidió un impuesto más alto sobre las rentas del capital: "No hay absolutamente ninguna justificación para que las personas que reciben dividendos paguen muchos menos impuestos que alguien que trabaja."
"Dirección seria" para los partidarios de AfD
Wagenknecht anunció a finales de octubre que fundaría un nuevo partido en enero. Junto con otros nueve diputados, declaró su dimisión del Partido de Izquierda, del que había sido una de las representantes más destacadas durante muchos años. Con su nuevo partido, dice que también quiere ofrecer a los simpatizantes de la AfD una "dirección acreditada" para votar.
"El Partido de Izquierda no es mi adversario político", subraya Wagenknecht en una entrevista con RND. "Espero que el partido se encuentre a sí mismo". En su opinión, sin embargo, no hay "suficiente potencial de votantes" para el rumbo actual del partido. Tras la dimisión de Wagenknecht y sus seguidores, el Partido de la Izquierda en el Bundestag no ha alcanzado la fuerza mínima necesaria para obtener el estatus de grupo parlamentario. El grupo parlamentario quiere ahora iniciar su propia disolución.
Fuente: www.ntv.de