Una mujer de Texas obligada a llevar un embarazo de alto riesgo presenta una demanda para abortar
Kate Cox afirmó que la actual prohibición del aborto en el estado pone en peligro legal a su marido y a su ginecólogo si aborta en Texas.
Se cree que la demanda es uno de los primeros intentos en el país por parte de una persona que pretende abortar por orden judicial desde que el Tribunal Supremo anuló el año pasado el caso Roe contra Wade, según el New York Times.
"La Sra. Cox está actualmente embarazada de 20 semanas, y ha estado en tres salas de urgencias diferentes en el último mes debido a fuertes calambres y pérdidas de fluidos no identificables", según la demanda. "Debido a que la Sra. Cox ha tenido dos cesáreas previas ('cesáreas'), continuar con el embarazo la pone en alto riesgo de complicaciones graves que amenazan su vida y su fertilidad futura, incluyendo ruptura uterina e histerectomía".
Según la demanda, al bebé de Cox se le diagnosticó trisomía 18 y no se espera que viva más de unos días fuera del útero. "Los médicos de la Sra. Cox le han informado de que 'tienen las manos atadas' y que tendrá que esperar hasta que su bebé muera dentro de ella o llevar el embarazo a término, momento en el que se verá obligada a someterse a una tercera cesárea, sólo para ver a su bebé sufrir hasta la muerte", afirma la demanda.
La trisomía 18, a veces denominada síndrome de Edwards, es una anomalía cromosómica que puede causar defectos cardíacos y otras anomalías orgánicas. En aproximadamente la mitad de los casos, el feto muere antes de nacer. Muchos niños que nacen con ella mueren a los pocos días, y más del 90% fallecen en el plazo de un año.
La ley de Texas prohíbe el aborto después de aproximadamente seis semanas, excepto para salvar la vida de la madre o para prevenir "un deterioro físico sustancial e irreversible de una función corporal importante, que no sea una afección psicológica." Cox -embarazada de 20 semanas- dijo que, aunque ha acudido tres veces a urgencias con fuertes calambres, la ley es demasiado vaga para dejar claro si un aborto en esas circunstancias sería legal.
"No quiero continuar con el dolor y el sufrimiento que han asolado este embarazo. No quiero someter a mi cuerpo a los riesgos de continuar con este embarazo", dijo Cox en una declaración escrita publicada por el Centro de Derechos Reproductivos, que presentó la demanda en el condado de Travis.
Cox pide al juez que emita una orden de restricción temporal y una orden judicial permanente que impida al estado aplicar su prohibición del aborto contra ella, su marido y su médico.
"Aunque la vida de la Sra. Cox puede no estar en peligro inminente, corre un alto riesgo de padecer muchas enfermedades graves que ponen en peligro su fertilidad futura y pueden convertirse en una amenaza para su vida de forma repentina e inesperada", dice la demanda.
En ella se afirma que la ginecóloga de Cox, la doctora Damla Karsan, cree "de buena fe" que Cox está amparada por la excepción legal a la prohibición del aborto, pero no puede practicárselo sin una orden judicial porque "no puede arriesgarse a perder su licencia médica, a ir a la cárcel de por vida y a multas civiles masivas" si su creencia no es aceptada por los tribunales.
La Oficina del Fiscal General de Texas no respondió inmediatamente a la solicitud de comentarios de la CNN el martes.
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Fuente: edition.cnn.com
