Rusia y China planean probablemente un túnel submarino en Crimea
Rusia utiliza el puente de Crimea para abastecer a la línea del frente ucraniana. Sin embargo, la línea de conexión ya estaba expuesta al fuego de misiles de Ucrania. Según un informe, un túnel gigantesco podría ser la solución, y la ayuda podría venir de China.
Empresarios rusos y chinos cercanos al gobierno han mantenido conversaciones secretas sobre planes para construir un túnel submarino que conecte Rusia con Crimea. Así lo informa el Washington Post. Al parecer, el objetivo es crear una ruta de transporte protegida de los ataques de Ucrania.
Las conversaciones se habrían iniciado a raíz de la creciente preocupación rusa por la seguridad del puente sobre el estrecho de Kerch, de unos 18 kilómetros de longitud. El puente, que se construyó a una velocidad récord tras la anexión de Crimea en 2014, sirve como importante ruta logística para el ejército ruso. Sin embargo, sigue siendo uno de los objetivos más importantes para los militares ucranianos y ya ha sido bombardeado dos veces por Ucrania.
Según el analista Alexander Gabuyev, Rusia quiere utilizar un túnel para garantizar al menos los suministros a la línea del frente tras la falta de éxitos en la guerra de Ucrania. Existe el "riesgo de que Ucrania intente interrumpir permanentemente el puente de Kerch".
Un esfuerzo costoso
Según informa el periódico, los expertos estadounidenses ven grandes problemas si se planea la construcción cerca del puente existente. En primer lugar, los costes ascenderían a varios miles de millones de dólares y, en segundo lugar, nadie ha intentado nunca una obra semejante en una zona de guerra.
Según el informe, los correos electrónicos indican que la Chinese Railway Construction Corporation (CRCC), una de las mayores constructoras chinas, ha manifestado su disposición a participar en el proyecto. Los mensajes fueron facilitados al Washington Post por funcionarios ucranianos que querían desvelar la posible participación de China, y se dice que la creación de un consorcio chino-ruso en Crimea es también una confirmación de los planes de construcción de túneles.
En la correspondencia electrónica se afirma que CRCC está "dispuesta a garantizar la construcción de proyectos ferroviarios y de construcción de carreteras de cualquier complejidad en la región de Crimea". La empresa estatal ha construido muchas de las mayores redes de carreteras y ferrocarriles de China y ha estrechado lazos con Rusia en los últimos años a través de proyectos como la ampliación del metro de Moscú.
Los chinos piden secreto
La parte rusa no nombra a ninguna de las personas que participan en el consorcio, práctica habitual para evitar las sanciones occidentales. La CRCC también prefiere mantener el proyecto en secreto. Un correo electrónico subraya que CRCC sólo participará bajo la "estricta condición de absoluta confidencialidad" y que el nombre de la empresa se sustituirá en todos los contratos por el de "otra entidad jurídica no afiliada". A través de los correos electrónicos también entra en juego un banco chino, que está dispuesto a "convertir sus fondos en dólares en rublos para transferirlos a Crimea para financiar proyectos".
Expertos en grandes proyectos de transporte internacional declararon al Washington Post que construir un túnel bajo el estrecho de Kerch es técnicamente factible y que China cuenta con la experiencia y el equipo necesarios. No obstante, sería una empresa enorme, comparable al túnel de Fehmarnbelt entre Dinamarca y Alemania, que lleva ocho años en construcción. El proyecto cuesta más de 8.700 millones de dólares y sería el túnel más largo de Europa cuando esté terminado a finales de la década.
Por ello, se considera poco probable que el túnel de Kerch pueda completarse a tiempo para apoyar a Rusia en su esfuerzo bélico. Sin embargo, Moscú puede verlo como una inversión a más largo plazo para proporcionar un enlace seguro a una zona que podría estar disputada durante décadas.
Fuente: www.ntv.de