"¡Merde alors!" - El luxemburgués Jean Asselborn deja su cargo
Es uno de los luxemburgueses más conocidos en el extranjero. Y en el Gran Ducado, toda una generación no recuerda que haya habido otro Ministro de Asuntos Exteriores. Jean Asselborn (74), Ministro de Asuntos Exteriores de su país durante más de 19 años, deja el cargo.
Ya no hay sitio para el socialdemócrata en el nuevo gobierno liberal-cristiano del Primer Ministro Luc Frieden. "Sabía que después de casi 20 años tendría que llegar a su fin", dice. "Creo que lo dominaré".
Desde hoy, Luxemburgo tiene un nuevo Ministro de Asuntos Exteriores: el liberal Xavier Bettel, anteriormente Primer Ministro luxemburgués durante diez años, ha tomado el relevo de Asselborn.
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Cuando Asselborn se convirtió en Ministro de Asuntos Exteriores en 2004, sus homólogos seguían siendo Condoleezza Rice (EE.UU.) y Joschka Fischer (Alemania). Desde entonces, sus colaboradores han calculado que ha visto ir y venir a 241 ministros de Asuntos Exteriores de otros países.
"He estado 48 veces en Nueva York y 80 en Berlín", dice. Hace ocho semanas se hizo una foto con siete colegas, de los que sólo cuatro siguen en el cargo: "Las cosas van muy deprisa". Había sido el ministro de Exteriores de la UE que más tiempo llevaba en el cargo, desde 2010.
Por qué lo deja
En octubre fue reelegido miembro de la Eurocámara, de la que ya formaba parte desde hacía 20 años, pero no aceptó el mandato. Asselborn también era responsable de migración. El hecho de que los países de la UE no quisieran acoger a refugiados afganos tras la caída de Kabul en agosto de 2021 fue "una de mis mayores decepciones": "Eso me chocó".
Y ahora hay de nuevo "este caos" en materia de migración: "Eso realmente me afectó". Y opinó: "No se puede exagerar, si no se apaga la vela". Así que renunció a su mandato.
Político respetado
Asselborn, que dejó pronto los estudios, trabajó en una empresa de neumáticos y más tarde terminó una segunda carrera de Derecho en Nancy (Francia), es apreciado -y temido- como hombre de palabras claras. Sobre todo cuando algo le llega al corazón:
Cuando el entonces ministro del Interior de Italia, Matteo Salvini, dijo que no quería acoger a ningún refugiado, Asselborn le dio una lección sobre los antiguos trabajadores invitados italianos que vivían en Luxemburgo, que concluyó con las palabras "Merde alors!" -que también se pueden traducir amablemente como "Maldito infierno"-.
El intento de Salvini de desacreditar a Asselborn con un vídeo del incidente fracasó: "Merde alors" se comercializó con orgullo en Luxemburgo en camisetas y tazas de café.
Asselborn siempre ha sido inflexible en materia de derechos humanos. Considera una debilidad de la UE que Hungría y Polonia hayan causado "grandes problemas al Estado de Derecho". "Rusia demuestra hacia dónde deriva un país cuando el Estado de Derecho deja de funcionar. No debemos ceder ni un ápice".
Ministro de Asuntos Exteriores con autocrítica
El ataque ruso a Ucrania, el 24 de febrero de 2022, y el de Hamás a Israel, el 7 de octubre, son dos fechas "en las que probablemente no soy el único ministro de Exteriores que dice: ¿Qué hemos hecho mal para que se produzcan estos acontecimientos?". Ahora tenemos que intentar sacar lo mejor de la situación. ¿Fallos? La UE debería haber trabajado más enérgicamente a favor de la solución de dos Estados en Oriente Medio, "entonces no existiría Hamás en esta forma".
No diría que la UE es débil. "Vemos que unos ocho o diez países llaman a nuestra puerta para convertirse en miembros. Así que no puede ser señal de que seamos débiles", afirma. Y el hecho de que la UE siga existiendo "es algo positivo". Al fin y al cabo, ya ha sobrevivido a muchas crisis: Desde la crisis constitucional a la crisis del euro, pasando por el Brexit.
En el futuro, Asselborn tendrá más tiempo para su bicicleta de carreras, con la que recorre más de 400 kilómetros a la semana para mantenerse en forma. Pero también tiene ya citas para su tiempo como ministro fuera de servicio. Y: "Tengo que hacer mis propias llamadas telefónicas, conducir yo mismo y organizarlo todo yo mismo". Lo que menos echará de menos es "el interior de los aviones: allí pasé meses de mi vida".
Fuente: www.dpa.com