La UE recibe señales positivas y una petición de China
Las relaciones entre la Unión Europea y China se han vuelto muy tensas en los últimos tiempos, sobre todo en cuestiones comerciales. Al mismo tiempo, la Unión Europea y la República Popular se necesitan mutuamente. ¿Pudo la cumbre enmendar la relación?
En su 24ª cumbre, celebrada en Pekín, la UE y China dieron otro pequeño paso de acercamiento en la disputa sobre cuestiones comerciales y competencia desleal. Según la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, el Gobierno de la República Popular se mostró abierto al problema del déficit comercial negativo. "Me complace que hayamos acordado con el Presidente Xi que el comercio entre ambos debe ser equilibrado", declaró von der Leyen tras las conversaciones con el líder del Estado y del partido, Xi Jinping.
El déficit comercial a favor de China se ha duplicado en los dos últimos años hasta alcanzar casi 400.000 millones de euros. Esto es motivo de preocupación para muchos europeos, dijo la política alemana de la UE. Por otra parte, el comercio diario de mercancías entre China y la UE supera los 2.000 millones de euros, según declaró el Presidente del Consejo de la UE, Charles Michel, durante las conversaciones. Se espera que puedan aplicarse medidas concretas para reequilibrar esta relación.
La UE es el socio comercial más importante de China. Ésta es otra de las razones por las que la segunda economía mundial reaccionó con nerviosismo a los planes de Bruselas de ser más independiente en algunos sectores económicos, como el de algunas materias primas. En Pekín, sin embargo, von der Leyen y Michel subrayaron que no querían desvincularse de China. Michel y von der Leyen no se pronunciaron sobre la polémica investigación de Bruselas sobre las subvenciones chinas a los coches eléctricos. El tema ya se había debatido, dijeron. No quisieron hacer comentarios sobre investigaciones en curso. China ha criticado duramente la investigación.
La UE acusa a China de utilizar las subvenciones a los fabricantes de coches eléctricos para presionar a la baja los precios de los vehículos eléctricos hasta tal punto que distorsionan la competencia en el mercado de la UE. Expertos y representantes de la industria automovilística se muestran escépticos ante la medida de Bruselas porque temen sanciones de Pekín como contramedida. Von der Leyen dijo que las subvenciones a los coches eléctricos eran parte del problema del déficit comercial a favor de China.
Demasiados productos en China
Según Von der Leyen, las razones del déficit son el acceso más difícil al mercado chino para las empresas de la UE, el trato preferencial que reciben allí las empresas chinas y el exceso de capacidad de producción en China. Los productos que no pueden venderse en China acaban en el mercado internacional y, por tanto, también en Europa, donde compiten con las empresas locales. A Europa le gusta la competencia, dijo von der Leyen. "Pero la competencia también debe ser justa". Según ella, en las próximas reuniones se debatirá una lista de otros puntos, que no detalló. Quieren ver resultados concretos de China, dijo. "Esto determinará, por supuesto, el futuro de nuestra relación".
Los líderes de la UE también pidieron a Pekín que elimine las barreras de mercado para las empresas europeas. Von der Leyen vio avances en la normativa para que las empresas extranjeras transfieran datos fuera de China. Pekín quiere crear más claridad para las exportaciones de datos con un "mecanismo", dijo. Hasta ahora, la vaguedad de las normas hacía que las empresas no siempre pudieran estar seguras de no infringir la ley.
Sin rivales, sin enfrentamientos
La parte china, por su parte, habló sobre todo de cooperación. Xi dijo que, en su opinión, China y la UE deberían ser socios para una cooperación mutuamente beneficiosa. A pesar de sus diferentes sistemas políticos y económicos, ambas partes no deben considerarse rivales ni entrar en confrontaciones. Probablemente aludía a declaraciones de altos cargos políticos de la UE, que a menudo describen a China como "socio, competidor, rival sistémico".
No hubo resultados concretos en la primera cumbre en persona desde 2019. Michel y von der Leyen se refirieron a futuras rondas de conversaciones en las que se debatirán más a fondo algunos de los problemas. Otros temas fueron el papel de China en la elusión de las sanciones por parte de Rusia, la guerra en Ucrania y el conflicto entre Israel y la organización islamista Hamás.
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Fuente: www.ntv.de