La petición urgente de fondos para Ucrania de la Casa Blanca choca con una cruda realidad en el Capitolio

Con las conversaciones estancadas y la previsión de que los legisladores abandonen Washington por vacaciones a finales de la próxima semana, las posibilidades de que la Casa Blanca consiga más fondos para Ucrania parecen poco halagüeñas, sobre todo teniendo en cuenta que la administración parece estar a punto de agotar su capacidad para adquirir equipos y armas para Ucrania sin más dinero del Congreso.

En una carta dirigida el lunes a los líderes del Congreso, la directora de la Oficina de Gestión y Presupuesto, Shalanda Young, afirmó que "sin la acción del Congreso, a finales de año nos quedaremos sin recursos para adquirir más armas y equipos para Ucrania y para proporcionar equipos de las reservas militares de Estados Unidos".

"No hay una olla mágica de financiación disponible para hacer frente a este momento", escribió Young. "Nos hemos quedado sin dinero, y casi sin tiempo".

El líder de la mayoría en el Senado, Chuck Schumer, sigue adelante con sus planes de forzar una votación sobre el paquete suplementario sin los cambios en la política fronteriza, pero ha ofrecido a los republicanos la oportunidad de votar una enmienda al proyecto de ley que se enfrentaría a probabilidades casi imposibles de ser añadida. Los republicanos del Senado han dejado claro que votarán en contra de sacar adelante el suplemento sin cambios sustanciales en la política fronteriza.

Se acaba el dinero para reponer las reservas estadounidenses

La mayor parte de los aproximadamente 44.000 millones de dólares en ayuda militar que EE.UU. ha proporcionado a Ucrania ha procedido de dos fuentes: la Autoridad Presidencial de Reducción (PDA), que permite al Pentágono retirar equipos y sistemas de armas de sus propios inventarios para enviarlos a Ucrania, y la Iniciativa de Ayuda a la Seguridad de Ucrania (USAI), que permite al Pentágono utilizar el dinero asignado por el Congreso para comprar nuevos equipos a los fabricantes de defensa estadounidenses.

Rescatistas trabajan en el lado de un hospital que fue fuertemente dañado por un ataque con misiles rusos, en medio del ataque de Rusia contra Ucrania, en la ciudad de Selydove, región de Donetsk, Ucrania 21 de noviembre 2023.

Las fuentes han informado a CNN de que, si bien la USAI se está agotando, la mayoría de las demás cuentas ya se han utilizado o se han gastado. El Pentágono dijo a principios de noviembre que la financiación de la USAI se había agotado. Según un funcionario de la administración, sólo quedan unos 1.000 millones de dólares en fondos para vigilancia de defensa e inteligencia.

Mientras que la USAI está agotada, quedan unos 4.800 millones de dólares en la PDA, según el portavoz del Pentágono, el general de brigada Pat Ryder. El problema es que a algunos funcionarios estadounidenses les preocupa que los fondos del PDA puedan verse aún más restringidos por la cantidad de dinero de que dispone Estados Unidos para reponer sus existencias y reemplazar lo que envía a Ucrania. Y ahora mismo, sólo quedan unos 1.000 millones de dólares de fondos disponibles para reponer esas reservas, según uno de los funcionarios estadounidenses que habló con la CNN.

Por lo general, la mayor parte de lo que se suministra a Ucrania de las reservas estadounidenses son modelos más antiguos -pero que siguen funcionando- de cualquier equipo que se necesite, según un funcionario estadounidense familiarizado con la financiación. Normalmente se reponen con equipos más nuevos, según el funcionario. Y el lunes, la Vicesecretaria de Prensa del Pentágono, Sabrina Singh, dijo que aunque al Pentágono todavía le quedan fondos de la PDA, "lo importante es centrarse en que no tenemos suficiente dinero para reponer lo que sacamos de nuestras existencias".

El martes, Ryder añadió que, salvo nuevo apoyo del Congreso, las decisiones de gasto del Pentágono en Ucrania dependerán pronto de múltiples factores, entre ellos "nuestra capacidad para reponer nuestros recursos." Un segundo funcionario estadounidense que habló con CNN bajo condición de anonimato también hizo hincapié en que a pesar de tener varios miles de millones restantes en la financiación de la PDA, la capacidad del Pentágono para enviar equipos a Ucrania podría verse restringida por los fondos disponibles para reemplazar el equipo en sus propios inventarios.

"No podemos dar a alguien nuestro coche usado si no tenemos dinero para comprar uno nuevo", dijo el funcionario.

Un funcionario de defensa estadounidense añadió que si EE.UU. no consigue "reponer nuestros servicios a tiempo", sin fondos suplementarios, "sin duda nos enfrentaremos a retos para la preparación existente". No obstante, ese funcionario también afirmó que todas las decisiones de reducción se han tomado "teniendo en cuenta las necesidades actuales en todo el mundo".

Los republicanos siguen escépticos

Sin embargo, la urgencia de los argumentos de la Casa Blanca no ha calado entre algunos republicanos.

Y los conservadores de la Cámara de Representantes, algunos de los cuales se oponen desde hace tiempo a la ayuda adicional a Ucrania, dijeron que el mensaje de la Casa Blanca estaba cayendo en "oídos sordos."

"Cualquier advertencia de esta administración cae en saco roto. Ellos son los causantes", dijo el martes a CNN el representante republicano Ralph Norman, de Carolina del Sur. "Quiero que el presidente se dé cuenta de lo que está en juego aquí con nuestro país. Queremos ver a Ucrania tener éxito y lo hemos hecho, juntamos dinero, juntamos los fondos previamente - ahora es el momento de asegurar nuestra frontera."

El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, también respondió a la carta de la OMB el martes, escribiendo que no presentaría más ayuda a Ucrania en el pleno de la Cámara a menos que se respondiera a una serie de preguntas sobre cómo se utilizarían los fondos y a menos que se incluyeran cambios firmes en la política fronteriza, a pesar de que las conversaciones se han topado con un importante obstáculo.

Mike Johnson, presidente de la Cámara de Representantes

Johnson dijo que desde que se reunió con el presidente en octubre, ha sido claro en que "la financiación suplementaria de Ucrania depende de la promulgación de un cambio transformador en las leyes de seguridad fronteriza de nuestra nación."

"En segundo lugar", dijo Johnson, "expliqué que el Congreso y el pueblo estadounidense deben recibir respuestas a nuestras repetidas preguntas sobre: la estrategia de la Administración para prevalecer en Ucrania; objetivos claramente definidos y obtenibles; transparencia y rendición de cuentas por los dólares de los contribuyentes estadounidenses invertidos allí; y qué recursos específicos se necesitan para lograr la victoria y una paz sostenible."

Schumer ha fijado una votación de procedimiento para el miércoles sobre el paquete de ayuda que incluye financiación para Ucrania, Israel, Taiwán y la frontera sur, pero no incluye cambios en la política fronteriza. Los senadores republicanos prometen que votarán en contra a pesar de las advertencias de la Casa Blanca.

"Puede que sea necesario un voto de cloture fallido sobre el suplemento antes de que el senador Schumer se dé cuenta de que vamos en serio", dijo el lunes a la prensa el senador John Cornyn, de Texas.

Austin presiona a los legisladores en privado

El secretario de Defensa, Lloyd Austin, habló en privado con los legisladores durante el Foro de Defensa Nacional Reagan en California durante el fin de semana sobre la importancia de asegurar la financiación, entre otras prioridades de seguridad nacional, dijo Ryder a CNN.

"Si no nos enfrentamos hoy a la agresión descarada del Kremlin, si no disuadimos a otros posibles agresores, no haremos más que envalentonarlos, y provocaremos aún más derramamiento de sangre y caos", dijo Austin en su intervención pública en el foro. "La invasión rusa de Ucrania ofrece un sombrío anticipo de un mundo de tiranía y agitación que debería estremecernos a todos".

Y no se trata sólo de Ucrania; la financiación suplementaria también está destinada a proporcionar ayuda en materia de seguridad a Israel, y a los socios en el Indo-Pacífico.

"Tenemos capacidad para hacer las tres cosas", dijo un funcionario de Defensa. "Pero necesitaremos la ayuda del Congreso".