El jefe del PNUMA advierte de la aceleración del calentamiento global
A dos semanas de la conferencia mundial sobre el clima COP 28, la directora del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), Inger Andersen, ha advertido de un aumento drástico de las temperaturas. "La humanidad está batiendo todos los récords equivocados en lo que se refiere al cambio climático", declaró Andersen en el prólogo de un informe del PNUMA publicado el lunes en Nairobi sobre las llamadas lagunas de emisiones en la protección del clima mundial. Urge redoblar los esfuerzos".
Las emisiones de gases de efecto invernadero habrían alcanzado un nuevo récord en 2022. Según la responsable del PNUMA, las temperaturas mundiales en septiembre de este año eran de media 1,8 grados centígrados más altas que en la era preindustrial. Es casi seguro que 2023 será el año más cálido jamás registrado.
Se necesitan medidas más contundentes
Por tanto, los compromisos asumidos hasta ahora en el marco del Acuerdo de París sobre el Clima no son suficientes. Incluso si se cumplen, el mundo se encamina a un aumento de la temperatura de entre 2,5 y 2,9 grados centígrados este siglo en comparación con la era preindustrial.
El responsable del PNUMA subrayó que la posibilidad de alcanzar aún los objetivos del Acuerdo de París depende en gran medida de que se incrementen las medidas de adaptación al clima antes de que finalice esta década. Las emisiones previstas para 2030 tendrían que reducirse al menos entre un 28% y un 42% en comparación con los escenarios previstos actualmente para alcanzar los objetivos acordados de calentamiento global de 2 y 1,5 grados respectivamente. Según el informe de la ONU, las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero aumentaron un 1,2% entre 2021 y 2022 hasta alcanzar un nuevo nivel récord de 57,4 gigatoneladas de dióxido de carbono equivalente.
En el Acuerdo de París sobre el Clima celebrado en 2015, la comunidad internacional acordó el objetivo de 1,5 grados para el calentamiento global con el fin de evitar que se superen puntos de inflexión peligrosos con consecuencias irreversibles y evitar las consecuencias más catastróficas del cambio climático. Para ello, sólo puede liberarse a la atmósfera terrestre una cantidad limitada de gases de efecto invernadero perjudiciales para el clima, como el dióxido de carbono (CO2). La mayoría de ellos se liberan al quemar petróleo, gas natural y carbón. Sin embargo, los expertos creen que las medidas previstas por los países hasta la fecha no son ni mucho menos suficientemente ambiciosas.
Fuente: www.dpa.com