¿Conflicto de intereses para el Ministro de Justicia francés?
El Ministro de Justicia francés, Éric Dupond-Moretti, se enfrenta a una sentencia potencialmente trascendental en el juicio por un presunto conflicto de intereses. Porque cuando el Tribunal de Justicia de la República decida esta tarde si le absuelve o le condena, el futuro político del ministro también estará directamente en juego. Si es condenado, probablemente tendría que abandonar el gabinete.
El proceso se centra en la cuestión de si Dupond-Moretti se aprovechó de su cargo de Ministro de Justicia para resolver litigios de su época de abogado. En concreto, se trata de procedimientos administrativos contra un juez y tres altos funcionarios del sistema judicial que Dupond-Moretti habría ordenado. La fiscalía le acusa de un conflicto de intereses que puso en peligro su imparcialidad como ministro. Pide un año de libertad condicional. El ministro se enfrenta a un máximo de cinco años de cárcel y una multa de 500.000 euros.
Dupond-Moretti niega con vehemencia las acusaciones de sindicatos, jueces y fiscales, e insiste en su absolución. Los observadores creen que el ministro insiste como si no pasara nada. Dejó sin respuesta las preguntas sobre las posibles consecuencias que quería extraer de la sentencia.
El juicio se considera una novedad. Por primera vez, un ministro francés que sigue en su cargo tiene que responder ante el Tribunal de Justicia de la República. Este tribunal se encarga exclusivamente de las faltas cometidas por los ministros en el ejercicio de sus funciones.
El futuro político de Dupond-Moretti está en juego
Para Dupond-Moretti, el juicio trata sobre todo de su futuro político. La Primera Ministra, Élisabeth Borne, había dejado claro que se aplica la regla: quien sea condenado debe abandonar el gobierno. Hace casi dos años, por ejemplo, el Ministro francés de la Pequeña y Mediana Empresa, Alain Griset, fue condenado y dimitió.
Pero no está claro qué ocurre exactamente después de la sentencia. El bravucón Dupond-Moretti probablemente se mostrará muy reacio a abandonar el cargo y aún podría recurrir ante el Tribunal de Casación. Se rumorea que intentará por todos los medios mantenerse en el cargo si la sentencia es leve. Sin embargo, la indignación -especialmente de la judicatura- sería inevitable.
Para el presidente francés, Emmanuel Macron, la salida de su ministro de Justicia sería una vergüenza, según el diario francés "Le Figaro". El jefe de Estado liberal ha mantenido hasta ahora al ministro, considerado uno de sus confidentes más cercanos en el gabinete y que sin duda ha cumplido en el cargo. Macron ha renunciado a normas anteriores en favor de Dupond-Moretti. Se le permitió permanecer en el cargo durante una remodelación del Gobierno, a pesar de que ya había una investigación en curso contra él. Incluso cuando se abrió una investigación, no fue destituido. Ni siquiera se nombró un ministro interino mientras duró el juicio.
Fuente: www.dpa.com
