Mayor peaje para los camiones: componente climático y dinero para el ferrocarril
A partir de hoy, los vehículos pesados que circulen por las autopistas y carreteras nacionales alemanas deberán pagar un peaje mucho más elevado. El peaje incluye ahora también un recargo por la emisión de dióxido de carbono (CO2) perjudicial para el clima.
La base de los costes adicionales específicos en función de las emisiones del vehículo es un recargo de 200 euros por tonelada de CO2. El Gobierno federal espera que el nuevo componente de CO2 genere miles de millones de ingresos adicionales, que también se canalizarán por primera vez hacia los ferrocarriles. El sector del transporte protestó contra las tasas y advirtió de un aumento de los precios al consumo.
Los cambios también deben incentivar
El peaje para camiones se calcula en función de la distancia recorrida y de una tasa en céntimos por kilómetro, que antes ya incluía cuotas por costes de infraestructura, contaminación acústica y atmosférica. Para el nuevo recargo por CO2, los camiones se asignarán a clases de emisiones, según explicó el operador de peajes Toll Collect, de propiedad federal. El trasfondo de la diferenciación climática es una directiva de la UE. Los cambios aprobados por el Bundestag también pretenden incentivar la circulación de más camiones limpios. Los camiones sin emisiones estarán exentos del peaje hasta finales de 2025. Sin embargo, el sector del transporte se queja de que apenas hay camiones eléctricos y faltan puntos de recarga.
La subida irá seguida de una ampliación del peaje según la ley aprobada por la coalición semafórica en octubre: a partir del 1 de julio de 2024, deberán pagar peaje las furgonetas más pequeñas de más de 3,5 toneladas, en lugar de las de 7,5 toneladas como hasta ahora. El Ministerio de Transportes calcula que 300.000 nuevos vehículos estarán sujetos a peaje. Sin embargo, los viajes realizados por empresas comerciales seguirán estando exentos. Hasta la fecha, alrededor de un millón de vehículos pesados alemanes y extranjeros circulan por las carreteras con ordenadores de a bordo para el cobro del peaje.
Se esperan ingresos multimillonarios
En el futuro, el Gobierno federal recibirá más dinero, que podrá reservarse para inversiones en transporte independientemente de la incierta situación presupuestaria. Los ingresos previstos pasarán de algo menos de 8.000 millones de euros este año a más de 15.000 millones el próximo. De 2024 a 2027 se espera generar unos ingresos adicionales de 30.500 millones de euros.
También se reorganizará el uso de estos ingresos: La mitad de los ingresos de los peajes se seguirán destinando a la mejora de las carreteras federales, y el resto, principalmente, a "medidas en el ámbito de los ferrocarriles federales", según se indica en el proyecto de ley.
El sector del transporte ya se ha manifestado en contra de la fuerte subida, que debería repercutirse en los clientes. El Ministerio Federal de Transportes también lo espera. Sin embargo, los costes de peaje sólo representan una pequeña proporción de los costes de transporte y una proporción aún menor de los costes totales del producto final, según el proyecto de ley. Por tanto, el impacto en los precios al consumo sería "marginal".
Fuente: www.dpa.com
