BMW en apuros por culpa de sus proveedores en Marruecos
Una mina de cobalto perteneciente a la familia real marroquí está causando problemas a BMW. Los reporteros de investigación descubrieron niveles de arsénico en los alrededores cientos de veces superiores. Además, los explotadores no son muy escrupulosos con la protección de los trabajadores. El fabricante de automóviles necesita la materia prima para las baterías.
Según BMW, la empresa está buscando aclaraciones a raíz de un informe sobre violaciones de la protección medioambiental y laboral en una mina de cobalto de Marruecos. La empresa se ha puesto en contacto con el proveedor Managem y le ha pedido información adicional, dijo un portavoz de BMW. "Si hay alguna mala conducta, debe remediarse". El portavoz de BMW continuó diciendo que las primeras acusaciones contra Managem ya se habían hecho en verano. En aquel momento, la empresa había proporcionado a BMW documentos que parecían creíbles. Los certificados medioambientales del explotador de la mina estaban al día, añadió. Una consulta a Managem solicitando una declaración quedó inicialmente sin respuesta.
El "Süddeutsche Zeitung", la NDR y la WDR informaron de que en la mina de Marruecos se habían producido graves violaciones de la normativa medioambiental y de seguridad e higiene. Por ejemplo, se encontraron niveles significativamente excesivos de arsénico en muestras de agua. Además, Managem incumple las normas internacionales de protección de los trabajadores y toma medidas contra los sindicatos críticos.
Lagos secos con residuos blancos
Managem es propiedad mayoritaria de la familia real marroquí y, según su propia información, explota varias minas en varios países africanos. El cobalto es necesario, entre otras cosas, para las baterías de los coches eléctricos. La mayor parte de los yacimientos de cobalto del mundo se encuentran en el Congo, donde sigue habiendo trabajo infantil, sobre todo en las minas pequeñas. Por esta razón, BMW ya no se abastece de cobalto del Congo, dijo el portavoz de BMW. La empresa de Múnich obtiene alrededor de una quinta parte de sus necesidades de cobalto de Marruecos; el resto procede de Australia.
Según los periodistas, numerosas cuencas de captación alrededor de la mina podrían contener arsénico, que al parecer se libera cuando el cobalto se almacena y procesa con agua. Esto deja lagos secos con residuos blancos. Cuando llueve mucho, se desbordan y vierten en un pequeño río que conecta la mina con los pueblos del valle.
Fuente: www.ntv.de