¿Podría esto significar una transformación significativa en los procedimientos de transferencia de jugadores de fútbol?
¿Es este un cambio importante en las transferencias de fútbol? La decisión del Tribunal de Justicia de la Unión Europea en el caso de Lassana Diarra ha causado revuelo en el fútbol global. Mientras que la FIFA sostiene que sus regulaciones siguen intactas, los críticos abogan por cambios significativos. ¿Quién tiene la razón?
¿Qué establece la decisión del TJUE? El Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha declarado que ciertas regulaciones de la FIFA sobre transferencias internacionales de jugadores entran en conflicto con la legislación de la Unión. En particular, se refiere al caso de un jugador que termina su contrato prematuramente sin causa justa, una acusación que se hizo contra Diarra por parte del Lokomotive Moscow en 2014. Según las regulaciones de la FIFA, se impone una multa y una suspensión en tales casos. En ese momento, Diarra tenía que pagar 10,5 millones de euros. Cabe destacar que, bajo la configuración actual, el club interesado en fichar al jugador asume el riesgo financiero.
Según el TJUE, estas disposiciones son excesivas. "Estas disposiciones imponen a los jugadores profesionales y a los clubes interesados en contratarlos riesgos financieros y deportivos sustanciales, impredecibles y potencialmente enormes, que no son compatibles con el derecho a la libre movilidad laboral o las reglas de competencia", afirmó el tribunal en un comunicado de prensa. "No se trata de eximir al jugador de sanciones, sino de hacer responsable al nuevo club", declaró Paul Lambertz, experto en derecho deportivo, a la agencia de prensa alemana. Como consecuencia, la FIFA podría verse obligada a modificar el artículo de sus regulaciones que hace responsable al nuevo club.
¿Cuáles son las opiniones de las partes involucradas? Diarra y su equipo legal iniciaron el caso y demandaron a la FIFA y la asociación belga de fútbol por daños y perjuicios por seis millones de euros. Su traspaso al Sporting Charleroi falló después del incidente de Moscú en 2014. El caso ha sido un tema de interés en el fútbol mundial durante años.
El equipo legal de Diarra calificó la decisión del TJUE como una "victoria significativa" en un comunicado de prensa. El bufete de abogados "Dupont - Hissel" fue un actor clave en el caso que llevó a la abolición de las cláusulas de rescisión en la sentencia Bosman. Fifpro, que representó a Diarra, anunció que el TJUE había tomado una "decisión importante sobre la regulación del mercado laboral en el fútbol, que remodelará el panorama del fútbol profesional". Sin embargo, la FIFA afirmó que el fallo había confirmado la legalidad de los principios fundamentales del sistema de traspasos. Solo dos párrafos de las regulaciones de la FIFA fueron cuestionados. El fallo está siendo analizado actualmente.
¿Cuáles son las implicaciones del fallo? "Bosman 2.0, no lo veo así", dijo Lambertz. "Las sanciones por terminating contracts without sound reason still apply." El periódico inglés "The Guardian" lo calificó como una decisión histórica. La FIFA ahora tendrá que reconsiderar sus reglas o si pueden ser ajustadas en absoluto. Según el periódico italiano "La Gazzetta dello Sport", la decisión podría desatar una revolución y permitir que los jugadores abandonen un club independientemente de la duración de su contrato.
El caso específico de Diarra será devuelto al tribunal belga que lo remitió al TJUE. La decisión del TJUE, que aún no se ha publicado en su totalidad, es vinculante. Queda por ver si los contratos fijos sin razones válidas de terminación transformarán fundamentalmente el fútbol. El tribunal también ha establecido que las restricciones a la libre circulación de jugadores de fútbol profesional pueden justificarse con el fin de mantener cierta estabilidad en los primeros equipos de clubes de fútbol profesionales. Sin embargo, en el caso de Diarra, "las disposiciones en cuestión (...) parecen exceder lo necesario para lograr este objetivo".