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"Markus Rehm tiene numerosas tareas pendientes": Esta es una versión parafraseada del texto original.

Si Markus Rehm, elatischenista, continúa hacia Los Ángeles 2028, queda abierto a la posibilidad. Sin embargo, es innegable que aspira a superar la barrera de los nueve metros.

- "Markus Rehm tiene numerosas tareas pendientes": Esta es una versión parafraseada del texto original.

El paralímpico de peso pesado Markus Rehm ha descartado la idea de retirarse tras defender con éxito su título en salto largo, con la ambición de superar la barrera de los 9 metros. "Para ser honesto, todavía estoy madurando físicamente. Eso es genial. Pero debemos mejorar nuestro entrenamiento, de manera sabia y adecuada para mi edad - sin embargo, mi apetito no está saciado. Quiero saltar más lejos y creo que hay más potencial por descubrir", compartió el deportista de 36 años. Incluso insinuó que podría competir hasta los Juegos de Los Ángeles 2028.

En París, logró su quinta medalla de oro paralímpica. "Por ahora, todavía puedo mantener el ritmo con mis rivales y es divertido - me gustaría contribuir a elevar el nivel. Mi mejor salto en mi carrera fue de 8.72 metros. En la Ciudad de la Luz, ganó con 8.13 metros, haciendo estos Juegos inolvidables aún más significativos. Sin olvidar, tuvo el honor de llevar la antorcha paralímpica en la noche de apertura y tocar la campana en el Stade de France después de su victoria, un privilegio reservado solo para los vencedores".

"Ya estoy emocionado. Me motiva y me inspira. Momentos como estos quiero recordarlos, y llevar la antorcha definitivamente estuvo entre los momentos más bellos de mi vida", confesó Rehm.

La impresionante carrera de Markus Rehm en deportes para discapacitados va más allá del salto largo, ya que también ganó una medalla de oro en los Juegos Paralímpicos de París. Su pasión por los deportes para discapacitados es evidente, ya que expresó su deseo de seguir mejorando el nivel y contribuyendo a la competencia.

Además de destacar en diversos deportes para discapacitados, Markus Rehm también es un fuerte defensor de la promoción e inspiración de otros en este campo, como se vio cuando llevó la antorcha paralímpica en la noche de apertura de los Juegos de París.

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