La reaparición de Tiger Woods en el Hero World Challenge demuestra que no está listo para "navegar hacia la puesta de sol
El esperado regreso del 15 veces campeón de los majors al golf profesional en el Hero World Challenge de las Bahamas no fue perfecto, ni es probable que lo fuera nunca.
Pero en su primer torneo en casi ocho meses, Woods demostró que todavía puede ser competitivo a un alto nivel y que su deseo de seguir jugando no ha disminuido.
El domingo terminó con par en el Albany Golf Club, en el puesto 18 de 20 de la clasificación general. En su última vuelta hizo cinco birdies -incluido un excelente putt largo en el quinto hoyo-, pero también algunos errores: un doble bogey en el segundo hoyo y otros tres bogeys en los hoyos octavo, undécimo y decimosexto.
Con todo, hubo algunos signos prometedores para el jugador de 47 años. Woods recorrió una media de 305 yardas desde el tee de salida, demostrando que su juego largo goza de buena salud, y también demostró que su maltrecho y envejecido cuerpo aún puede soportar los rigores de cuatro rondas de golf de competición.
"Creo que he recorrido un largo camino desde estar un poco oxidado a jugar cuatro días y quitarme un montón de óxido, lo que fue genial", dijo Woods a Golf Channel después de su ronda final.
"El físico de jugar y competir de nuevo, hacía tiempo que no lo hacía. Estuvo bien salir ahí fuera con los chicos, divertirse y competir. Sólo desearía haber jugado un poco más limpio, pero siempre hay una próxima vez".
Para Woods, la próxima vez será el PNC Championship, un torneo padre-hijo que comienza en Orlando, Florida, el 14 de diciembre.
Será la cuarta vez consecutiva que Woods participe en el evento junto a su hijo Charlie y su segundo torneo desde que se sometió a una operación de tobillo en abril.
En 2024, Woods espera jugar en el PGA Tour una vez al mes. Mientras competía en las Bahamas, dijo que el Genesis Invitational en febrero y el Players Championship en marzo podrían ser opciones a medida que acelera su regreso competitivo.
A partir de ahí, podría aparecer en el Masters en abril e incluso en los Juegos Olímpicos de París a finales de año.
"Una vez al mes parece razonable, y me da un par de semanas para recuperarme, una semana para ponerme a punto", dijo Woods el domingo. "Quizá pueda coger el ritmo de algo así. Ese era el plan para el año que viene. No veo por qué iba a cambiar".
Durante el Hero World Challenge, del que Woods es anfitrión, dijo que se había quedado "gratamente sorprendido" con su recuperación física entre rondas.
El viernes firmó un par de 70 golpes, que le auparon al 15º puesto de la clasificación después de una primera ronda irregular, y el sábado hizo 71 golpes.
Pero lo más importante será que su cuerpo aguantó, unos ocho meses después de que Woods dijera que había soportado "dolor constante" mientras jugaba en el Masters.
La operación de tobillo que sufrió tras su retirada en el Augusta National en abril fue la última de una larga lista de lesiones que han obligado a Woods a alejarse del golf; sufrió graves lesiones en las piernas en un accidente de coche en 2021 y también se ha sometido a operaciones en la espalda y la rodilla izquierda a lo largo de los años.
Teniendo en cuenta lo que ya ha conseguido a lo largo de su laureada carrera -15 grandes títulos y un récord conjunto de 82 victorias en el PGA Tour-, se podría disculpar a Woods por querer alejarse del deporte por completo.
"Podría fácilmente navegar hacia el atardecer, no volver a tocar un palo, no volver a hacer nada, simplemente ir a vivir su vida y disfrutar de la segunda mitad de su vida, hacer lo que sea, salir con sus hijos", dijo Scottie Scheffler, que ganó el Hero World Challenge por tres golpes, a los periodistas antes del torneo.
"Pero sigue volviendo y quiere competir y sigue haciendo lo que es mejor para los jugadores y para el PGA Tour. Es bastante inspirador para el resto de los que participamos en el juego".
Tras su victoria del domingo, Scheffler dijo que era "muy especial" ver a Woods de vuelta en un campo de golf, caminando por las calles con su icónico atuendo rojo y negro.
Podría convertirse en una imagen más habitual para el resto del mundo del golf el año que viene, ya que uno de los mejores jugadores del deporte continúa luchando contra la luz mortecina.
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Fuente: edition.cnn.com
