La nueva reina alemana del vino caliente apuesta por el tinto
A la nueva reina alemana del vino caliente, Louisa Kress, le gustan los tintos clásicos. "Mi favorito es un Dornfelder, con canela y clavo y muchas naranjas afrutadas", dice esta trierina de 30 años. Por eso también lleva un dirndl rojo vino en su despacho real. "Me queda bien", explica riendo y ajustándose la diadema de plata que lleva en la cabeza. En las próximas semanas, levantará su copa en el mercado navideño de Tréveris, sobre todo para beber vino caliente. "También bebo vino blanco, pero todo con moderación".
La profesora de matemáticas y religión ya sabe un par de cosas sobre vino y coronas. Hasta el verano pasado, era la reina del vino de Tréveris y tenía zumo de uva bastante fresco en su copa. "Ahora espero con impaciencia el nuevo despacho, me entusiasma". Ahora hay una gran variedad de vinos calientes: la clave es un buen vino base, dice Kress, cuyos abuelos eran viticultores en el Alto Mosela.
"De niña pasé mucho tiempo en el viñedo", dice. Más para comer uvas que para ayudar. "Pero mi amor por el vino empezó en la bodega". Ahora está deseando que llegue la Navidad. "Con estas luces por todas partes, brilla de maravilla".
Tras su incorporación oficial el 28 de noviembre, Kress estará siempre entre los puestos los viernes, sábados y domingos. "Pero también estoy dispuesta a representar al vino caliente y a mi ciudad en otros lugares", afirma. El cargo de reina alemana del vino caliente existe desde 2008, y en los últimos tres años no ha habido ninguna dignataria debido al coronavirus; Kress es la número ocho.
"Los vinos calientes de bodega son cada vez más populares", afirma Ernst Büscher, portavoz del Instituto Alemán del Vino (DWI) en Bodenheim, cerca de Maguncia. Esta bebida alcohólica caliente forma ya parte integrante de la gama de vinos de muchas bodegas. Actualmente hay casi 250 bodegas en todo el país que ofrecen vino caliente.
Durante mucho tiempo, los vinos calientes "no tenían la mejor imagen": "Sobre todo cuando se trata del día después", dice. Pero eso ha cambiado con los vinos calientes de alta calidad de los viticultores. Además, muchas bodegas lo ven como una oportunidad de ofrecer a sus clientes algo "con un toque personal" basado en su propia receta casera.
En Tréveris, la reina del vino caliente sigue la tendencia: por primera vez esta temporada, también se servirá un rosado como bebida caliente, explica Angela Bruch, organizadora del mercado navideño de Tréveris. El mercado comienza este viernes (24 de noviembre).
Fuente: www.dpa.com
