La factura de la calefacción preocupa a muchos inquilinos de Berlín
La cuestión de los costes de calefacción está causando cada vez más problemas a muchos inquilinos de Berlín. La asociación de inquilinos ya observó esta tendencia el año pasado. Sin embargo, continúa de forma aún más clara: "En 2022 tuvimos un total de 14.551 consultas sobre las facturas de calefacción. Este año ya hubo 13.049 antes de que acabara el año", dijo el director gerente Wibke Werner a Deutsche Presse-Agentur. Esta cifra contrasta con las 9213 de 2020 y las 7866 del año anterior.
Reclamaciones adicionales para muchos inquilinos
Según la experiencia de la asociación de inquilinos, los inquilinos se enfrentan a elevadas reclamaciones adicionales por muchas facturas del año pasado. "Esto suele deberse a la fuerte subida de los precios de la energía, mientras que en la mayoría de los casos el consumo no ha variado significativamente respecto al año anterior", explica Werner.
En algunos casos, incluso ha disminuido. "Por un lado, esto puede deberse al invierno relativamente suave de 2022/23, pero también puede ser un indicio de que los inquilinos han restringido mucho su consumo debido a las advertencias sobre el aumento de los precios de la energía y la preocupación por la amenaza de elevadas reclamaciones adicionales por las facturas de calefacción."
La situación sigue siendo tensa desde la perspectiva de los inquilinos, según Werner. "El hecho de que los precios de la energía ya no suban tan bruscamente no sirve de mucho a los inquilinos por el momento". Esta evolución sólo se hará patente con un desfase temporal en la próxima factura.
Los consumidores tienen mucho que esperar
"En estos momentos, se están juntando las cargas de los costes elevados por varias razones, como la continua inflación elevada, los altos costes de los alimentos, los frecuentes ajustes de precios por parte de varios proveedores, desde correos hasta la electricidad o el teléfono, y, en algunos casos, las elevadas reclamaciones adicionales de las facturas de calefacción".
No es improbable que algunos inquilinos lleguen al límite de su capacidad financiera, afirma Werner. "Aquí hacen falta políticos. Un primer paso sería la ampliación del freno de los precios de la energía y el gas, que se ha debatido pero aún no se ha decidido."
Fuente: www.dpa.com