Hamás comete violencia sexual masiva contra las mujeres

Aumentan las denuncias de delitos sexuales cometidos por Hamás contra mujeres israelíes. La policía está registrando declaraciones de testigos alarmantes. Según activistas de los derechos de la mujer, las atrocidades siguen una estrategia brutal. Están preocupadas por el resto de mujeres rehenes en manos de Hamás.

Incluso semanas después de la masacre de Hamás en Israel, siguen saliendo a la luz nuevos informes de brutales actos de violencia sexual contra mujeres y niñas. Muchos de ellos son profundamente inquietantes. Por ejemplo, un rescatista de Zaka relató a una comisión especial parlamentaria el horror que le esperaba en una ciudad fronteriza el 7 de octubre: "El cadáver de una mujer, desnuda, con un objeto punzante clavado en sus partes íntimas". El rescatista Chaim Otmazgin dijo que también había encontrado varias mujeres muertas con el abdomen desnudo en otros lugares tras la masacre perpetrada por terroristas de Hamás y otros grupos.

El 7 de octubre, terroristas de Hamás de la Franja de Gaza cometieron cerca de la frontera la peor masacre de la historia de Israel. Murieron más de 1.200 personas. Unos 240 rehenes fueron llevados a Gaza y menos de la mitad han sido liberados hasta ahora. Los informes sobre la violencia altamente sádica del día de la masacre también alimentan la preocupación por las jóvenes que siguen retenidas por la organización terrorista y cuya liberación Hamás se ha negado hasta ahora.

Un paramédico dijo que había encontrado en una casa del kibutz Be'eri a una niña de 14 años que había sido violada y asesinada. Estaba tendida en el suelo de su dormitorio con el abdomen desnudo, las piernas abiertas y restos de semen en la espalda. La adolescente había recibido un disparo en la cabeza.

La policía investiga delitos sexuales

El 7 de octubre, la policía israelí abrió una investigación sobre las denuncias de delitos sexuales masivos contra mujeres. Una comisión independiente de expertos también está recopilando relatos de testigos presenciales, pruebas forenses y de otro tipo. Los terroristas de Hamás y otros grupos habían documentado ellos mismos muchas de sus atrocidades con cámaras corporales, algunas de las cuales se retransmitieron en directo a través de las redes sociales y también de los teléfonos móviles de las víctimas.

La policía Shelly Harusch dijo en una reunión de la comisión parlamentaria que hasta ahora se habían recogido unas 1.500 declaraciones de testigos sobre los incidentes. "La investigación se centra también en los delitos sexuales contra las víctimas". Los terroristas de Hamás detenidos declararon durante los interrogatorios que también habían recibido órdenes de violar a mujeres.

Testimonios inquietantes

Según informes policiales, hay varios relatos de testigos presenciales de violaciones cometidas por terroristas en el festival de música Nova el 7 de octubre. Un superviviente informó de un "apocalipsis de cadáveres". Había visto a muchas mujeres jóvenes sin ropa, algunas mutiladas, otras con el abdomen mutilado.

Un participante, que se había escondido de los asesinos entre los arbustos, relató la espantosa violencia infligida a una joven. "La inclinaron hacia delante y me di cuenta de que la estaban violando, uno tras otro. Luego se la pasaron a otro hombre que llevaba uniforme", dijo el testigo. "Estaba viva cuando la violaron. Le tiró del pelo y le disparó en la cabeza mientras seguía violándola. Ni siquiera se subió los pantalones. Le cortaron el pecho y jugaron con él en la calle".

Testigos presenciales informaron de que las mujeres eran violadas junto a los cadáveres de sus amigos. A algunas las mataron después, a otras se las llevaron a Gaza. Un vídeo distribuido por los terroristas mostraba el secuestro de una joven con los pantalones empapados de sangre. Otro vídeo mostraba el cuerpo sin vida de la alemana Shani Louk siendo trasladado a la Franja de Gaza en una camioneta.

Huellas de violencia grave en cadáveres femeninos

Tras la masacre, muchos de los cadáveres fueron llevados al rabinato militar, cerca de Tel Aviv, para su identificación. Un patólogo, un dentista y un fotógrafo militar estuvieron presentes en cada caso. Un voluntario relató los cuerpos de mujeres horriblemente maltratados que fueron llevados allí.

Los brazos y las piernas de una soldado estaban rotos por muchos sitios. A las víctimas femeninas a menudo les disparaban una vez en el cuerpo y luego, muy a menudo, en la cabeza. "Era evidente que se trataba de mutilaciones", afirmó.

La cooperante informó de muchos indicios de delitos sexuales. Algunos de los cadáveres estaban vestidos con pantalones ensangrentados, por ejemplo. Otros empleados habían informado de cadáveres con los genitales mutilados. En algunos cadáveres se encontraron granadas de mano. "Tuvimos que salir corriendo rápidamente para ponernos a salvo". Se llamó entonces a expertos en demoliciones. Lo que dificulta aún más las pruebas: en muchos casos, los cadáveres estaban en tan mal estado que no se pudieron tomar muestras de semen o ADN.

La violación sigue asociada a la vergüenza de las víctimas

La profesora de Derecho Yifat Bitton afirma que muchas de las supervivientes están profundamente traumatizadas y no todas son capaces de hablar de sus experiencias. Las agresiones sexuales siguen estando fuertemente asociadas al estigma y la vergüenza. "Es otra carga para las víctimas", afirma Bitton. Puede llevar tiempo que todos hablen de sus terribles experiencias". También se sabe de otras guerras que se violaba a las mujeres como medio de humillación. Sin embargo, en Israel nunca se habían vivido atrocidades de esta magnitud y gravedad.

Cochav Elkajam Levy, profesor de Derecho de la Universidad Hebrea de Jerusalén, dijo sobre los incidentes del 7 de octubre: "No cabe duda de que se cometieron crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad". Es importante recoger los testimonios y las pruebas para que las víctimas reciban justicia.

"Creamos la Comisión de Expertos el octavo día de la guerra porque cada vez salían a la luz más testimonios de crímenes brutales contra mujeres y niños", afirma Levy. Subraya que la violencia de género no se limita a los delitos sexuales. "Cortar órganos a las mujeres, esconder una granada en el cuerpo de una mujer, matar a un bebé delante de su madre o secuestrar a madres delante de sus hijos, mujeres y niños: todo eso es violencia de género".

También se han analizado numerosos vídeos en las redes sociales y vídeos de las cámaras corporales de los terroristas de Hamás. Se está creando una base de datos y un archivo con todo el material. "Queremos garantizar que los crímenes cometidos contra las mujeres el 7 de octubre nunca se olviden". Muchas historias han sido verificadas por varias fuentes.

Queja por la tardía respuesta de ONU Mujeres

Varias de las expertas israelíes llevan semanas quejándose de la falta de respuesta de las organizaciones internacionales de mujeres. "La falta de condena de estos crímenes socava la legitimidad de las organizaciones internacionales", afirma Levy.

Sarah Weiss es diplomática israelí y asesora jurídica responsable de los contactos con Naciones Unidas. Se queja de que organismos de la ONU como ONU Mujeres han guardado durante mucho tiempo un obstinado silencio sobre los crímenes cometidos contra mujeres y niñas israelíes. "Estamos hablando de crímenes sexuales a gran escala, cuyo objetivo es aterrorizar a la población israelí", afirma. "Lo que me parece realmente mal es que organizaciones como ONU Mujeres no se hayan pronunciado al respecto".

Sólo ocho semanas después del ataque terrorista de Hamás y tras las críticas masivas, ONU Mujeres escribió en un X-Post el sábado por la noche: "Condenamos inequívocamente los brutales ataques de Hamás contra Israel el 7 de octubre. Estamos consternados por los numerosos informes de atrocidades de género y violencia sexual durante estos ataques."