Erling Haaland enloquece en el festival del gol de Manchester
Erling Haaland está furioso: el noruego siente que él y su equipo fueron engañados por el árbitro hasta bien entrado el tiempo añadido de un espectacular partido de la Premier League contra el Tottenham Hotspur. Incluso después del pitido final, el enfado de Haaland no ha desaparecido.
El Manchester City y el Tottenham Hotspur dieron un espectáculo al mundo del fútbol el fin de semana en la Premier League: 3:3 fue el marcador tras 96 minutos salvajes, en los que los dos equipos punteros protagonizaron un emocionante ida y vuelta. Pero la gran final tuvo que ser cancelada, y Erling Haaland estaba furioso.
Ya en el tiempo añadido, el árbitro Simon Hooper "robó" una ventaja a la superestrella del Manchester City en su camino hacia un posible gol de la victoria. Haaland había recibido una falta en el centro del campo poco después del tardío gol del empate de los Spurs, pero Hooper pitó el pase que envió a Jack Grealish hacia la portería contraria. Y Haaland y varios de sus compañeros enloquecieron.
Atacaron airadamente a Hooper, que había levantado los brazos disculpándose al principio. Sobre todo a Haaland, que estuvo casi imparable. Hooper mostró tarjeta amarilla al delantero por su arenga. El entrenador Pep Guardiola defendió su salvaje reacción: "Es normal", dijo Guardiola. "El reglamento dice que no se puede hablar con el árbitro ni con el cuarto árbitro, así que hoy deberíamos haber expulsado a 10 jugadores. Está un poco decepcionado. Incluso el árbitro -si hoy jugara para el Man City- estaría decepcionado con esa acción, eso seguro."
"Yo cometo errores, los jugadores también"
Guardiola también fue indulgente con Hooper: "Yo cometo errores, los jugadores también. Cuando Erling cayó, el árbitro dijo que el juego continuaría y después de que hiciera el pase, paró el juego. No quiero criticarle". No quiso citar la decisión de Hooper como motivo del empate, que costó a los campeones dos puntos importantes en la apretada carrera por el título.
Pero a diferencia de Guardiola, Haaland no se calmó mucho después del pitido final: el noruego continuó su protesta en las redes sociales: con "Wtf?" - una abreviatura de -traducido elegantemente- "¿Qué demonios?" - el joven de 23 años comentó un vídeo de la escena. Y podría haber repercusiones: La FA, la federación inglesa de fútbol, podría sancionar a Haaland a posteriori, de acuerdo con su norma E3.1, que regula el comportamiento de jugadores y oficiales en las redes sociales.
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Fuente: www.ntv.de