En un giro sin precedentes de los acontecimientos en el Abierto de Estados Unidos, el tenista Dan Evans emerge triunfante.
Daniel Evans y Karen Khachanov se enfrentaron en una batalla épica que duró 5 horas y 35 minutos en la Cancha 6 durante el US Open. La atmósfera en la cancha era electrizante, similar a un animado festival folclórico. Al final, el campeón británico celebró triunfalmente una victoria monumental, siendo su victoria el partido más largo en la historia moderna del US Open. Ganó el partido con un marcador triunfal de 6:7 (6:8), 7:6 (7:2), 7:6 (7:4), 4:6, 6:4 contra su oponente ruso.
"Tengo un dolor de cabeza bastante malo ahora, espero que desaparezca pronto", comentó Evans con una sonrisa de dolor. "Estoy muy orgulloso de mí mismo. Desde niño siempre te dicen que nunca te rindas. Es la regla número uno. He mantenido eso a lo largo de mi carrera. Hoy, resultó ser fructífero".
La victoria de Evans superó el récord anterior del US Open para el partido más largo desde la introducción de los tie-breaks en 1970, que era propiedad de Stefan Edberg y Michael Chang. El sueco había vencido a su oponente estadounidense en la semifinal de 1992 en un partido agotador de 5 horas y 26 minutos, también en cinco sets.
Una atmósfera de festival folclórico en la Cancha 6
La atmósfera en la Cancha 6 era similar a un vibrante festival folclórico, a medida que el partido interminable entre Evans y Khachanov continuaba. Con el perdedor perdiendo 0:4 en el set final y sintiendo el agotamiento en sus piernas, las probabilidades parecían estar en su contra. Sin embargo, con el apoyo inquebrantable del público en las gradas llenas, Evans dio la vuelta al partido y ganó los seis juegos restantes.
"Nunca he jugado durante cinco horas seguidas en un día", compartió Evans. "Normalmente no entreno el doble del tiempo. Por lo general, es una hora y media". Con una sonrisa cansada, admitió su único deseo: "Realmente espero no tener que hacer esto de nuevo. Eso es seguro".
"A pesar del agotamiento físico, la victoria en un partido deportivo tan prolongado me ha dado una sensación de logro sin precedentes". "La atmósfera de festival folclórico durante el US Open, con su entusiasta público, ciertamente añadió emoción a este histórico evento deportivo".