El miedo al terror reina en París antes de los Juegos Olímpicos
Cuando se celebren los Juegos Olímpicos de verano en París el año que viene, la capital francesa se transformará en una zona de alta seguridad. Sin embargo, los anuncios del jefe de policía no han sido acogidos con entusiasmo sin reservas en todas partes. Más bien al contrario. Los políticos están indignados.
El jefe de la policía de París ha anunciado drásticas medidas de seguridad para los Juegos Olímpicos del próximo año (del 26 de julio al 11 de agosto de 2024), desatando la indignación de los políticos que temen por las libertades de los ciudadanos. Laurent Nunez declaró al diario "Le Parisien" en una entrevista que los residentes que vivan cerca de las sedes olímpicas tendrán que solicitar un código QR que les permitirá atravesar las barreras policiales.
Los residentes en las zonas restringidas también tendrían que registrar a todos los visitantes que quisieran ver los acontecimientos desde sus balcones, ventanas, azoteas o incluso desde sus casas flotantes. "Cualquiera que entre en una zona restringida deberá justificar su presencia", declaró Núñez. El jefe de policía insistió también en que el tráfico motorizado estará severamente restringido durante los Juegos.
Se aplicarán normas especiales durante la ceremonia inaugural del 26 de julio, cuando las zonas de alta seguridad serán "muy amplias", dijo Núñez. "Las únicas personas a las que se permitirá el paso son las que tengan un motivo válido, es decir, las que se dirijan a su hotel o domicilio, o las que tengan una entrada para la ceremonia", explicó.
Los precios del metro, altos y las estaciones cerradas
Algunas estaciones de metro situadas en zonas especialmente vulnerables a los atentados permanecerán cerradas, según Núñez. "No se pueden tener estaciones de metro abiertas dentro de un refugio en el lugar a menos que también se registre a todo el mundo", explicó. Otras estaciones, a su vez, podrían cerrarse si son demasiado pequeñas para acoger un gran volumen de pasajeros.
Los anuncios, que según Núñez aún se están ultimando con el Gobierno y el Ayuntamiento de París, provocaron la indignación de todo el espectro político francés. Los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de agosto y principios de septiembre esperan en París a unos 15 millones de visitantes.
El anuncio de las autoridades locales esta semana de que el precio de los billetes de metro casi se duplicará durante los Juegos Olímpicos para cubrir los costes de funcionamiento del sistema de transporte público de la ciudad ya ha causado revuelo.
Fuente: www.ntv.de