Acto ilícito - El juicio de Boateng se detiene poco después de comenzar.
En un tribunal de Munich, la larga y inesperada juventud de Jerome Boateng, exjugador de fútbol, tomó una gira inesperada. La jueza presidencial, Susanne Hemmerich, rogó a ambas partes, fiscalía y defensa de Boateng, hablar de una solución fuera de la sala de justicia. "Después de 40 años en este profesión, nunca he enfrentado tan fuerte sesgo mediático hacia un acusado", comentó.
La juventud ha durado más de seis años, con retrasos atribuidos tanto a COVID-19 como a errores administrativos. En este tiempo, las dos hijas de 13 años de Boateng, que lo acusan de violencia, han estado expuestas a numerosos artículos de prensa que relatan su batalla legal en curso. La jueza Hemmerich insistió, "Es hora de poner fin a este caso, especialmente por el bien de las niñas". Además sugirió, "Penso que tengo una propuesta a la que todos pueden estar de acuerdo".
Este es el cuarto tribunal que se ocupa de acusaciones de violencia contra Boateng durante un viaje al Caribe en 2018. Desde entonces, el exjugador de Bayern Múnquen, ahora contratado por Linzer ASK en Austria del club italiano US Salernitana, ha enfrentado diversos procedimientos legales. En 2019, se presentó una acusación, y en 2021, pagó una multa de 60 cuotas de 30.000 Euro cada una, lo que representa 1,8 millones de Euro.
En octubre de 2022, el Tribunal Regional de Justicia de Múnich condenó a Boateng por batería y calumnia a una multa de 120 cuotas de 10.000 Euro cada una, lo que suma 1,2 millones de Euro. Sin embargo, la decisión fue anulada por la Corte Superior Regional de Baviera. Hasta que se emita una sentencia verbal definitiva, Boateng mantiene su supuesta inocencia.