El Canciller Federal "confía" en la subvención a la fábrica de chips
Tras la trascendental sentencia presupuestaria del Tribunal Constitucional Federal, el Canciller Federal Olaf Scholz (SPD) ha expresado su confianza en que puedan seguir fluyendo los diez mil millones de euros previstos en subvenciones para la construcción de una fábrica de chips en Magdeburgo. "Queremos seguir impulsando la modernización de nuestra economía, y los semiconductores y la industria de semiconductores forman parte de ello", dijo Scholz el martes en la cumbre digital del Gobierno alemán en Jena. "No me ven ahora aquí como una persona sin confianza".
Sin embargo, el Canciller no aprovechó su comparecencia en la mesa redonda para garantizar firmemente las subvenciones. "No podemos sacudirnos la respuesta de las manos ahora, tenemos que trabajar duro para conseguirla".
El Tribunal Constitucional Federal había declarado inconstitucional una reasignación de 60.000 millones de euros en el presupuesto de 2021. Por tanto, el gobierno federal no puede utilizar fondos destinados a combatir la crisis del coronavirus para la protección del clima. Esto podría tener un gran impacto en el Fondo para el Clima y la Transformación, que el gobierno alemán quería utilizar para pagar numerosos programas de financiación.
El fabricante estadounidense de chips Intel tiene previsto construir una nueva fábrica de chips en Magdeburgo. La inversión asciende a unos 30.000 millones de euros, y el Estado tiene previsto aportar unos 10.000 millones. Los primeros chips se producirán en la capital de Sajonia-Anhalt a partir de 2027.
Antes de la comparecencia de Scholz, el ministro de Economía, Robert Habeck, ya se había pronunciado a favor de continuar con los planes multimillonarios de chips. El político de Los Verdes dijo que, tras la sentencia de Karlsruhe, no sólo sería posible ejecutar proyectos para los que ya hubiera una decisión formal de financiación. Tras la congelación presupuestaria, el Vicecanciller dijo en Jena que la financiación de todos los proyectos que ya han recibido una decisión formal de financiación está asegurada. "Sin embargo, la conclusión contraria sería inadmisible en mi opinión".
El proyecto de chips de Magdeburgo es considerado por los representantes de la industria digital como un hito importante en el camino hacia la soberanía digital porque reduce la dependencia de los fabricantes asiáticos de chips. Sin embargo, el presidente del Instituto Ifo, Clemens Fuest, se muestra crítico con el proyecto: "Los políticos manejan actualmente el dinero con bastante soltura y reparten subvenciones de dudosa justificación, como los 10.000 millones para Intel en Magdeburgo. La sentencia obliga ahora a poner a prueba muchas cosas", declaró el economista tras la decisión de Karlsruhe.
Fuente: www.dpa.com