ir al contenido

Disparo a través de puerta de piso - testigo percibe "mirada fija"

Un hombre dispara con un rifle contra la puerta de su vecino. ¿Quería matar por motivos de extrema derecha, como le acusa el fiscal? Más testigos han declarado en el juicio por intento de asesinato.

Figura de la ciega Justitia. Fotografía.aussiedlerbote.de
Figura de la ciega Justitia. Fotografía.aussiedlerbote.de

Extremismo - Disparo a través de puerta de piso - testigo percibe "mirada fija"

El lunes declararon más testigos en el juicio que rodea el disparo potencialmente mortal de un hombre a través de la puerta principal del piso de una joven en Hamburgo-Niendorf. Un vecino de la mujer paquistaní de 25 años declaró el martes ante el tribunal de distrito de Hamburgo que había notado un cambio en el acusado alemán unas semanas antes del crimen. El hombre de 49 años, que vivía en el piso de arriba de la mujer, tenía una "mirada fija", que también era diferente de cuando bebía habitualmente. "Como si tuviera algo en la cabeza de lo que quería deshacerse".

Según el anciano de 86 años, conocía al acusado desde hacía mucho tiempo y de vez en cuando coincidía con él en el pub. Contó que el acusado hablaba a menudo de "basura" cuando se refería a vecinos extranjeros. También le había dicho una vez: "Hay que echar a la escoria a tiros", confirmó el testigo en su declaración anterior a la policía. Sin embargo, nunca supo si lo decía en serio.

La fiscalía acusa al acusado de intento de asesinato. Al comienzo del juicio, el hombre admitió haber disparado a través de la puerta cerrada de su vecino con un rifle el 27 de mayo de este año. Según la acusación, cometió el delito "debido a sus pronunciadas opiniones xenófobas y de extrema derecha".

La bala atravesó la puerta y una cómoda y se alojó en la pared. No hubo heridos. Habían estado en el salón y no en el pasillo, según declararon la residente embarazada y su suegra el primer día del juicio.

El acusado insistió en su declaración en que no quería disparar a nadie. Sólo había querido asustar a los vecinos, cuyo supuesto estruendo le había molestado a menudo en el pasado.

Otra vecina citada como testigo subrayó el lunes que no había oído quejas de los nuevos residentes -a diferencia de los anteriores inquilinos- por el ruido. La mujer, de 54 años, confirmó su declaración anterior a la policía de que había oído al acusado decirle a su marido el día del crimen: "Son unos monos", deberían irse todos.

Su marido, que también declaró como testigo el segundo día del juicio, dijo que no lo recordaba. Sin embargo, relató que el acusado había hecho a veces comentarios de extrema derecha en las conversaciones. "Sólo hacía comentarios negativos sobre los extranjeros", dijo el hombre de 55 años. El juicio continuará el martes.

Informe policial del 28.05.23

Lea también:

Fuente: www.stern.de

Comentarios

Más reciente