Críticas al ministro y a la policía tras los disturbios en Dublín
Tras los graves disturbios de Dublín, arrecian las críticas a la ministra irlandesa de Justicia, Helen McEntee, y al jefe de la policía, Drew Harris. La líder del principal partido de la oposición, el Sinn Fein, Mary Lou McDonald, pidió la dimisión de ambos, según informó el sábado el diario "Irish Times".
Según McDonald, la policía perdió el jueves el control de algunas zonas de la capital irlandesa y cometió "errores operativos catastróficos". El miembro del gabinete Paschal Donohoe acusó al Sinn Fein de utilizar indebidamente la escalada con fines políticos partidistas. El jefe del Gobierno, Leo Varadkar, respaldó a los servicios de emergencia.
El jueves por la noche, numerosas personas se amotinaron en Dublín, entre ellas muchos ultraderechistas. Saquearon tiendas, atacaron a agentes de policía e incendiaron vehículos de emergencia y autobuses después de que un hombre apuñalara por la tarde a tres niños pequeños y a un cuidador, algunos de ellos de gravedad. Los disturbios se vieron avivados por la información difundida en las redes sociales de que el autor era un inmigrante. Decenas de personas fueron detenidas.
El viernes por la noche se desplegaron fuertes unidades policiales en el centro de la ciudad para evitar nuevos disturbios. Varias personas fueron detenidas provisionalmente. Se sospechaba que planeaban disturbios. Según informó la cadena RTÉ, la policía irlandesa recibió dos cañones de agua de Irlanda del Norte para estar preparada ante nuevos disturbios.
Representantes del gobierno elogiaron a los transeúntes que dominaron al atacante del cuchillo, entre ellos un repartidor brasileño. Golpeó la cabeza del hombre con el casco de su moto, declaró Caio Benício (43) al Irish Times. Benício, padre de dos hijos, criticó la insensatez de los disturbios. "Sé que también participaron grupos antimigrantes. Y yo, como inmigrante, fui quien ayudó a contener al agresor", dijo.
Fuente: www.dpa.com