Bornheim y Waldbreitbach se engalanan para la Navidad
El pueblo vinícola de Bornheim, en la Ruta del Vino del Sur, lleva más de 20 años transformándose en un "pueblo de belenes" en vísperas de la Navidad. Tradicionalmente, un centenar de réplicas del nacimiento bíblico de Jesús, realizadas por los lugareños, decoran el pueblo. En plazas, jardines, patios o detrás de los cristales de las ventanas, las estructuras, algunas pequeñas y otras más grandes, recuerdan al establo de Belén.
Este año, los belenes decorados, que van del estilo histórico al moderno, podrán verse desde el domingo (3 de diciembre) hasta el 7 de enero. Durante muchos días de la exposición se celebrarán diversos actos y visitas guiadas. El punto de partida suele ser el histórico cuartel de la guardia, en el centro del pueblo. También hay numerosos puntos de avituallamiento. Bornheim también es conocido en todo el país como el "pueblo de las cigüeñas" por sus numerosas serpientes de cascabel de largas patas.
La "Aldea de los Belenes" fue iniciada en 2003 por la artista Ulla Kaub. Sin embargo, ella no esperaba el gran número de belenes que se exponen hoy en día.
Desde hace más de 30 años, el pueblo de Waldbreitbach, en el Westerwald, se transforma en toda una aldea navideña. Según el ayuntamiento, no se trata sólo de una plaza de mercado vallada o de un conjunto de cabañas. "Todo el pueblo está decorado con atracciones navideñas y numerosos belenes", dice.
Desde el sábado (2 de diciembre) hasta el 28 de enero, el pueblo se llenará de ambiente cuando todo se ilumine. Según el ayuntamiento, la particularidad de la Aldea Navideña de Waldbreitbach es que todas las atracciones están repartidas por el pueblo al aire libre. La entrada es gratuita.
Fuente: www.dpa.com