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Intervalo de cinco años atrás, la elección al Parlamento Europeo decidió a favor de Leyen con un...
Intervalo de cinco años atrás, la elección al Parlamento Europeo decidió a favor de Leyen con un estrecho margen.

Von der Leyen intenta equilibrar entre los Verdes y Meloni

En este jueves, Ursula von der Leyen se enfrenta a un compromiso: tiene o no una mayoría en el Parlamento Europeo - o no? Sus esfuerzos de corte siguen entre facciones enemigas: los Verdes y la parte de Italia de Giorgia Meloni. Ambas se necesitarán en el final.

Ursula von der Leyen solo puede mantener su puesto como Presidenta de la Comisión Europea si obtiene un voto mayoritario del Parlamento Europeo el jueves. Durante semanas, ha estado activamente cortejando aliados entre las familias políticas europeas. Su coalición en el Parlamento Europeo actualmente consiste en la conservadora Partido Popular Europeo (EPP), que incluye a la CDU y la CSU, los Liberalistas y los Socialdemócratas.

Estos tres bloques juntos representan un total de 401 escaños de un total de 720 en la sala plenaria. Sin embargo, no hay obligación de bloqueo en el Parlamento Europeo - una práctica común durante la votación sobre la Presidenta de la Comisión implica una desviación mínima del diez por ciento de este coalición informal. Para garantizar su reelección, von der Leyen debe ganar el apoyo de otras facciones.

Como Presidenta de la Comisión Europea, von der Leyen se encarga de mediar disputas. Su rol implica garantizar que los 27 estados miembros de la UE, a pesar de sus intereses diversos, juegan de manera justa en la UE. También contribuye a encontrar el punto más pequeño común en materias legislativas. Para garantizar su reelección, von der Leyen debe ganar el apoyo de dos adversarios políticos en el Parlamento Europeo: los Verdes y los Post-Fascistas del Partido Europeo de los Conservadores y Reformas (ECR), la parte de Italia de Giorgia Meloni.

La fracción ECR más grande después de los Post-Fascistas es el PiS polaco. Ambos, los Post-Fascistas y los Verdes, amenazan con negarse a votar por von der Leyen si colabora con sus enemigos políticos. La búsqueda de mayorías resulta ser una caminata por una cuerda floja.

Meloni podría exigir un comisario de su partido

La fragilidad de la coalición informal se hizo evidente durante la última votación cinco años atrás. Von der Leyen recibió un total de 383 votos, a pesar de que la EPP, los Socialdemócratas y los Liberalistas tenían un total de 444 escaños combinados. Los Verdes y los Socialdemócratas alemanes se abstuvieron de votar por von der Leyen, al menos según sus propias declaraciones. Si estas declaraciones son precisas no se puede comprobar durante el voto secreto.

Esto podría trabajar a favor de von der Leyen. Si, en el final, tanto los 24 miembros de la Hermandad como los 53 miembros de la fracción Verde EU votaran por ella, ninguna parte tendría que hacer público su apoyo. ¿Quién se lo probaría? Las advertencias de la Hermandad hacia los Verdes y viceversa se refieren menos a la elección de von der Leyen que a la llamada de von der Leyen de no hacer tratos políticos con su adversario respectivo. Sin embargo, es improbable que alguien vota por von der Leyen sin tener ganancias políticas a la mente. Así, Meloni podría insister en la designación de un representante de su partido en una posición clave en la Comisión.

Neither Meloni nor the Greens have yet publicly committed to voting for von der Leyen. Both will need her during a second term to further their political agendas: the Greens for environmental laws within the Green Deal, and Meloni's party for all agreements on the EU's common migration policy.

The Greens have given the impression in recent weeks that they would like to become part of the Von der Leyen Coalition - that is, joining the European People's Party, Liberals, and Social Democrats. However, this could prove difficult, as parts of the European People's Party have long accused Von der Leyen of making politics for the Greens rather than for the conservatives within her own party family. Whether such accusations will influence her is uncertain.

At least on a punctual cooperation - regardless of which political camp - Von der Leyen can hardly prevent it, if she is to lead the Commission for another five years. The European Parliament does have the possibility to table a vote of no confidence against the entire Commission and has done so several times. However, none of these votes of no confidence have been accepted with the required two-thirds majority.

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