- Violencia no provocada en Mallorca: ¿Potencial participación de oficiales de Essen?
Oficiales Alemanes Acusados de Brutal Agresión a un Taxista en Mallorca
Oficiales de Essen están bajo sospecha de haber atacado brutalmente a un taxista en Mallorca. Cuatro individuos de origen alemán fueron detenidos poco después del incidente, que ocurrió en las primeras horas del martes, según informó la fuerza policial de la isla turística española. La sede policial de Essen está investigando en la actualidad si los sospechosos, que eran turistas, son efectivamente oficiales de ley alemanes. "Estamos al tanto de la situación", declaró un portavoz de la Agencia Alemana de Prensa. "Hay una sospecha, no es descabellado".
Según fuentes cercanas a la Agencia Alemana de Prensa, al menos dos de los sospechosos son supuestos oficiales de policía de Essen (Renania del Norte-Westfalia) que se encontraban en la isla por motivos personales. El periódico local "Rheinische Post" había informado anteriormente de esto. La agresión al mallorquín de 71 años se debió a un teléfono móvil extraviado, que el taxista no tenía, como confirmaron más tarde las autoridades españolas. Los cuatro sospechosos han regresado desde entonces a su país de origen.
El taxista José María P. relató a "Mallorca Zeitung" que pensó que iban a matarlo. Los agresores afirmaron ser oficiales de ley alemanes y le mostraron sus identificaciones, contó el septuagenario, que actualmente recibe tratamiento médico en Palma con un brazo roto, dos costillas rotas, ojos negros, diversas lesiones y numerosos moretones. La llegada de la policía real salvó su vida.
El incidente también fue informado por "Mallorca Magazin" y otros medios locales, así como por la televisión estatal española RTVE. La policía de Mallorca ha iniciado una investigación que podría tener graves consecuencias para los alemanes. El hijo de la víctima informó en televisión española que su padre podría perder un ojo. La ley española establece penas de prisión que van de tres a seis años por lesiones graves.
Todo comenzó en Ballermann
Según la víctima, tres de los cuatro sospechosos entraron en su taxi en Schinkenstraße, la calle principal del party en Ballermann, de camino a su hotel en el centro de la isla. "Dos de ellos estaban muy borrachos". Los otros tres del grupo total de siete pasajeros subieron al taxi de un colega.
Al llegar al destino, se produjo una discusión acalorada, según la policía y la víctima. Uno de los alemanes afirmó haber perdido su teléfono y acusó al taxista de habérselo robado. Al principio, todo estaba tranquilo, dijo el taxista. "Dividieron la cuenta y dejaron una buena propina. Incluso les ayudé a llevar a los dos pasajeros borrachos fuera". Sin embargo, surgieron problemas cuando uno de los pasajeros se dio cuenta de que su teléfono había desaparecido.
"Tres individuos más salieron del hotel", explicó José María desde su cama de hospital a los periodistas. "Dimos vuelta al taxi y buscamos el teléfono. No se encontró nada, pero me golpearon brutalmente".
Al llegar la policía a un hotel rural en Petra, a unos 40 kilómetros al este de Palma, uno de los alemanes habría ofrecido dinero al taxista y a la policía para retirar los cargos, según informes de los medios. Este supuesto soborno llevó al arresto inicial de uno de los alemanes, seguido de sus compañeros.
"Ella no quiere verlos tumbados en la playa"
"La medida en que este tipo de incidentes, especialmente en el contexto de crecientes protestas contra el turismo masivo, afecta a la percepción de los alemanes y los turistas extranjeros en general, no solo en Mallorca, sino en toda España, queda clara en el sentimiento expresado por un taxista: 'Durante 40 años, he llevado a alemanes por Mallorca. Nunca he tenido problemas con ellos. Ni siquiera durante los turnos de noche en Playa de Palma', le dijo a 'Mallorca Zeitung'. 'La gente solía preguntarme qué pensaba de los alemanes. Siempre los elogié. Ahora, ni siquiera quiero verlos tumbados en la playa'".
La sede de la policía alemana en Essen busca información para determinar si alguno de los detenidos es realmente un oficial de policía, ya que dos de los sospechosos son supuestamente de Essen. La Comisión, que asiste a los Estados miembros, podría desempeñar un papel en esta investigación, teniendo en cuenta las graves acusaciones contra los sospechosos oficiales.