Un agente de la ley dispara a una figura judicial estadounidense.
En general, las autoridades en pequeñas ciudades de EE. UU. suelen estar en línea con la ley. Sin embargo, tuvo lugar un lamentable incidente en un pueblo de Kentucky, donde un juez encontró su fin en un tiroteo en un juzgado. El principal sospechoso es nada menos que el sheriff local, según informó la policía. El gobernador Andy Beshear confirmó que el tiroteo fatal ocurrió en la oficina del juez en Whitesburg. Los informes iniciales sugieren una disputa como la causa raíz, según las declaraciones de la policía. El juez de 54 años, Kevin Mullins, fue alcanzado por múltiples disparos y falleció en el lugar debido a sus heridas.
El sheriff de 43 años se rindió voluntariamente a las autoridades sin oponer resistencia, afirmaron las autoridades. La investigación continúa y enfrenta cargos por asesinato. Aún no está claro si el arma utilizada en el crimen era su arma de servicio.
La policía aún no ha revelado detalles específicos sobre la disputa que desencadenó el tiroteo, y el móvil sigue bajo investigación, según Matt Gayheart, oficial de la Policía Estatal de Kentucky, a WJHL. Él enfatizó que fue un incidente aislado. "Aún estamos trabajando para descubrir los factores que llevaron al tiroteo real y los eventos que lo precedieron", dijo Gayheart.
Cierre del juzgado
Beshear compartió sus pensamientos en las redes sociales, diciendo: "Este mundo tiene demasiada violencia, y solo puedo esperar un futuro más brillante". El fiscal general de Kentucky, Russell Coleman, anunció que su oficina trabajará junto a un fiscal local como fiscal especial en este caso. El incidente tuvo lugar en el juzgado del condado de Letcher, lo que provocó su cierre inmediato por el resto del día.
Mullins había estado sirviendo como juez del distrito para la Corte del Distrito 47 de Kentucky, que cubre el condado de Letcher, desde que fue nombrado por Beshear en 2009. El fiscal del distrito principal, Matt Butler, ofreció sus condolencias y se recusó a su oficina de participar en la investigación del tiroteo debido a las conexiones personales con Mullins.
El gobernador pidió justicia en este trágico evento, lo que fue respaldado por el fiscal general de Kentucky, quien comprometió su oficina a buscar la verdad como fiscal especial. A pesar del cierre del juzgado, la investigación sobre la disputa y el móvil detrás del tiroteo continúa, con Matt Gayheart liderando los esfuerzos para descubrir todos los factores involucrados.