Posiblemente la última noche de aullidos de lobo en el Parque Natural de Hanau
Las noches de aullidos de lobo en el parque natural Alte Fasanerie de Hanau son una institución desde hace muchos años y son conocidas mucho más allá de los límites de la ciudad. El espeluznante aullido de los lobos siempre atrae a cientos de visitantes al bosque al atardecer, bajo la luna llena. Sin embargo, la próxima noche de aullidos de lobo de este lunes (18.00 h) podría ser el último evento de este tipo. Tras la muerte del líder Inuq, a los dos últimos lobos de tundra de la manada, Aslan y Monja, les cuesta un poco aullar, según explicó la bióloga del parque natural Marion Ebel, que crió a los lobos.
El motivo es la reorganización de la manada tras la muerte del líder Inuq a principios de septiembre. Durante el anterior aullido de los lobos en Halloween, el sucesor Aslan aulló, pero su hermana Monja le defraudó. "Mantuvo la boca cerrada de forma demostrativa", informó Ebel. "Espero que esta vez sea diferente y se ponga a llorar conmigo. Entonces está garantizado que Aslan entrará en acción". Aslan se ha adaptado bien a su nuevo papel de líder de la manada, que ahora sólo consta de dos lobos, pero Monja aún no ha aceptado del todo la nueva situación.
Si las cosas no salen bien este lunes por la noche, será el último aullido de lobo de este tipo en el parque natural, según Ebel. "Ahora sólo tenemos dos lobos, así que los aullidos serán menos frecuentes de forma natural", explica. "Además, ahora están en una edad en la que sus voces se vuelven más frágiles, aunque los aullidos sigan siendo muy divertidos".
Los dos lobos de la tundra tienen doce años y medio, una edad respetable para estos animales. Según el biólogo, sus congéneres en libertad sólo viven una media de siete años. Ebel tuvo a Aslan, Monja e Inuq a los ocho días de vida y los crió con biberón. Les enseñó a aullar cuando los cachorros aún estaban tumbados sobre su estómago. "Los animales me han quedado grabados", afirma esta bióloga doctorada. Pero ella misma está fuera de la jerarquía.
"Según mi experiencia, los lobos aúllan más en luna llena que en otras ocasiones", dice Ebel. "Pero pueden aullar en cualquier momento. Sólo que se ve mejor con luna llena". Aunque no se garantice ningún aullido en el acto del lunes por la noche, los visitantes recibirán sin duda información de Ebel sobre la biología y el comportamiento de los lobos.
Fuente: www.dpa.com