Más de 600 agentes de la ley se asegurarán de que Wiesn siga siendo la celebración pública más segura.
Después del incidente con el cuchillo en Solingen, los organizadores de los principales festivales populares están poniendo énfasis adicional en la seguridad. El Oktoberfest de Múnich, que comienza este fin de semana, busca ser lo más seguro posible. Habrá más de 600 oficiales de ley presentes para garantizar la seguridad. También se aplicarán diversas restricciones y multas significativas.
Las autoridades están confiadas en el 189º Oktoberfest. La Wiesn es conocida como el "festivo popular más seguro del mundo", dijo el líder del despliegue Christian Huber de la Presidencia de la Policía de Múnich, aunque también admitió: "No podemos garantizar la seguridad total". El equipo de seguridad está haciendo todo lo posible para acercarse al 100% de seguridad. "Podemos hablar de un nivel de seguridad muy alto", afirmó Huber. La situación de amenaza general ha aumentado, pero no hay señales concretas de peligro, agregó.
Alrededor de 600 oficiales de policía patrullarán el Oktoberfest de Múnich, desde el sábado hasta el 6 de octubre. Por primera vez, se utilizarán 40 detectores de metales. Además, habrá entre 1200 y 1500 stewardess contratados por la ciudad. Las inspecciones regulares en los puntos de entrada y la fuerte presencia policial han sido parte de la estrategia de seguridad de este festival popular a nivel mundial durante mucho tiempo, que atrajo a más de 7,2 millones de visitantes el año pasado, un nuevo récord.
El sitio será vigilado extensively por cámaras de policía, especialmente los fumadores deben tener en cuenta esto. A pesar de la legalización parcial de la marihuana, los porros siguen estando prohibidos en los festivales populares de Baviera. Al igual que el año pasado, cuando la marihuana aún era ilegal, la policía tomará medidas estrictas. Se pueden imponer multas de hasta 1500 euros por porros en la Theresienwiese. "Eviten fumar esa cosa en el terreno de la Wiesn", aconseja Huber.
Vigilancia con cámaras, prohibición de drones, cámaras corporales
La estrategia de seguridad en evolución también incluye la prohibición de bolsos y mochilas más grandes, así como cuchillos y botellas de vidrio. Intentar llevar un cuchillo desde una tienda al recinto del festival podría llevar a multas de hasta 1000 euros.
Los drones y los vuelos están prohibidos sobre el sitio. Alrededor de 50 cámaras vigilan el área del evento. Los oficiales de policía llevan cámaras corporales y las carreteras de acceso están aseguradas con barreras y macetas de concreto.
Habrá una fuerte presencia policial durante el Oktoberfest de Múnich, patrullando el recinto para garantizar la seguridad. Con más de 600 oficiales y stewardess adicionales, el festival busca mantener su reputación como el "festivo popular más seguro del mundo".