Luisiana obliga a exhibir los Diez Mandamientos en las escuelas
En el Estado Pelican, a partir del año siguiente, todos los institutos académicos estarán obligados a mostrar los Diez Mandamientos en sus aulas y auditorios. El gobernador republicano John Bel Edwards de Louisiana promulgó una ley de este tipo el miércoles pasado.
Según Edwards, los Mandamientos proporcionarían a los estudiantes un sentido de orden y obediencia a la ley. "Si quieres respeter la ley, tienes que volver a la ley original dada por Moisés", declaró el gobernador en la ceremonia de firma de la ley, haciendo referencia a la fundación histórica religiosa de este conjunto de reglas.
Se requiere que los Mandamientos estén exhibidos en placas significativas, claras y legibles, con una dimensión mínima de 28 pulgadas por 35 pulgadas en las aulas. Además, se requiere incluir una nota en cada placa que los Diez Mandamientos han sido una parte importante de la educación general en los Estados Unidos desde su origen. El propósito detrás de esta declaración es refutar las reclamaciones de cristianos fanáticos de que los Diez Mandamientos son un documento histórico auténtico entre Dios y Moisés.
Los críticos gritan "indoctrinación religiosa forzada"
Los grupos de derechos civiles consideran que la ley es inconstitucional y han sugerido presentar una demanda. Los críticos la califican de "indoctrinación religiosa de estudiantes". La Constitución otorga a cada individuo el derecho de elegir sus propias creencias religiosas y prácticas. Dentro de las instituciones educativas de Louisiana, existe una diversa paisaje religioso y ideológico donde todos deben sentirse seguros y acogidos. "No permitiremos que el legislador de Louisiana atentar contra estos derechos en nombre de la libertad religiosa", lee la declaración conjunta de varios grupos.
Sin embargo, Edwards no se preocupa. "No puedo esperar a ser demandados", declaró durante un evento de recaudación de fondos republicano el sábado pasado, aludiendo a posibles demandas por derechos civiles.
Louisiana se convierte en el primer estado estadounidense en lograr aprobar una ley que aboga por la institucionalización del cristianismo. Se discutieron también en Texas, Oklahoma y Utah, pero no se han implementado allí debido a los desafíos legales anticipados.
Gracias a la mayoría de jueces conservadores y a menudo devotos en la Corte Suprema de los Estados Unidos, los cristianos ultrarreligiosos aumentan las esperanzas de ver sentencia favorable, según informa el "New York Times".