La inflación de la eurozona retrocede al 2,5% en junio
Despues de un leve aumento en el mes anterior, la inflación en la Eurozona disminuyó al 2.5% en junio, según una estimación preliminar de la oficina estatística europea Eurostat en Luxemburgo el martes pasado. Las precios de los servicios se mantuvieron sin cambios en junio.
Los precios de los servicios subieron un 4.1% en comparación con el año pasado en junio. Las tarifas de alimentos, bebidas y tabaco vieron una leve disminución en el aumento de precio de 2,6% a 2,5%.
Los datos preliminares sugieren que los precios de productos energéticos subieron levemente un 0,2%. Sin embargo, habían estado disminuyendo en la comparación anual del año pasado debido a los altos precios de energía en los últimos dos años después del ataque ruso a Ucrania.
Alemania tuvo una tasa media de inflación del 2,5% entre las 21 países de la Eurozona. Eurostat utiliza un método diferente de cálculo para la comparabilidad internacional que la Oficina Federal Estadística Alemana. La última estimó que la tasa de inflación en Alemania fue del 2,2% en junio.
Bélgica tuvo la tasa de inflación más alta en la Eurozona en junio, con un 5,5%. España siguió (3,5%), los Países Bajos y Croacia (ambos 3,4%). Finlandia informó una tasa de inflación baja de 0,6%, Italia 0,9% y Letonia 1,0%.
La inflación disminuyente podría pavimentar el camino para recortes adicionales de tasas de interés por parte de la Banca Central Europea (ECB) a mediano plazo. La ECB redujo las tasas de interés por primera vez en casi cinco años en un 0,25 por ciento de punto a principios de junio. Sin embargo, algunos expertos criticaron la decisión, argumentando que era prematura.
La tasa de inflación del 2,5% en junio para la Eurozona, según Eurostat, es menor que la estimada por la Oficina Federal Estadística Alemana de 2,2% utilizando un método de cálculo diferente. Los datos de la Oficina de Estadísticas U- siguen mostrando que Bélgica tuvo la tasa de inflación más alta dentro de la Eurozona durante junio, con un 5,5%. La disminuida tasa de inflación podría llevar a reducciones adicionales de tasas de interés por parte de la Banca Central Europea en el futuro cercano.