ESPN guarda silencio tras el feo ataque de Aaron Rodgers a Jimmy Kimmel
El locutor deportivo encendió un torrente de reacciones el martes cuando permitió que el curioso conspiranoico y lesionado quarterback de los Jets de Nueva York Aaron Rodgers sugiriera sin fundamento durante su programa que Jimmy Kimmel podría ser nombrado en documentos que identifican a asociados de Jeffrey Epstein.
Kimmel, innegablemente una de las estrellas más brillantes del universo Disney, respondió a la afirmación hecha en el canal hermano de ABC, diciendo que las "imprudentes palabras" ponían a su familia "en peligro" y que si seguía así, los dos "seguirían debatiendo los hechos en los tribunales."
McAfee, por su parte, ofreció disculpas el miércoles. La personalidad deportiva, que confesó a Andrew Marchand, del New York Post, que paga a Rodgers siete cifras por aparecer en su programa, dijo a su audiencia que se supone que su programa es "edificante, alegre, divertido" y que no le "gusta que se nos asocie con nada negativo nunca."
"Algunas cosas, obviamente, cabrean mucho a la gente, especialmente cuando son acusaciones tan serias", dijo McAfee. "Así que pedimos disculpas por formar parte de ello".
La poco enérgica disculpa, presentada un día después de que se hiciera el comentario ofensivo, llegó demasiado tarde. El supuesto "chiste de mierda" de Rodgers sobre Kimmel, como lo describió McAfee, había dado la vuelta al mundo y había insuflado aire a la idea de que el cómico era socio de Epstein, el pederasta convicto.
Un portavoz de ESPN declinó hacer comentarios sobre el asunto y un representante de Disney no respondió cuando me puse en contacto con él el miércoles, a pesar de la inusual situación en la que una de las personalidades más prominentes del gigante del entretenimiento fue difamada desde dentro de las paredes del Reino Mágico.
Es poco probable que Bob Iger esté encantado de que uno de sus principales talentos vea su reputación manchada por el barro en la propia cadena de deportes de Disney. Pero tal vez el jefe de la Casa del Ratón debería familiarizarse con el ritual, dado que episodios como éste están destinados a repetirse con McAfee en su nómina.
De hecho, el drama Kimmel-McAfee-Rodgers subraya un problema creciente para ESPN, que el pasado mayo firmó un acuerdo de cinco años por 85 millones de dólares con McAfee para ampliar su papel en la cadena y llevar "The Pat McAfee Show" a sus ondas. En lugar de llamar la atención por sus comentarios deportivos, las conversaciones semanales de McAfee con Rodgers han dado paso al tipo de titulares que podrían provocar la envidia de Alex Jones, de InfoWars.
El antivacunas Rodgers, que se posiciona como un guerrero de la "libertad médica", ha utilizado repetida y descaradamente su plataforma en ESPN para cuestionar las vacunas Covid-19, a las que la comunidad científica ha atribuido el mérito de salvar innumerables vidas y devolver la normalidad a la sociedad tras un año de parones que brutalizaron la economía mundial. Pero a Rodgers no parece importarle lo que cree la inmensa mayoría de los profesionales de la medicina. En su lugar, se ha metido en el pantano febril ocupado por gente como Alex Berenson y Tucker Carlson.
Rodgers ha atacado al Dr. Anthony Fauci, ha promocionado al candidato presidencial antivacunas Robert Kennedy Jr. y se ha burlado de Travis Kelce llamándole "Sr. Pfizer" por anunciarse con la compañía farmacéutica. El otro día, en el programa de McAfee, Rodgers protagonizó lo que el Daily Mail calificó de "extraña perorata antivacunas", en la que habló de que los partidarios de las vacunas tienen supuestos "titiriteros".
Rodgers ha propagado esta basura en ESPN con el aliento de un McAfee regocijado. En lugar de replicar, McAfee a menudo se ríe con aprobación del jugador de la NFL, sin preocuparse aparentemente por el daño que su retórica irresponsable puede acarrear.
Y, para ser francos, ESPN y Disney no lo han hecho mucho mejor. En lugar de denunciar el peligroso cóctel de basura conspirativa que Rodgers sirve a su audiencia, ESPN -que se autoproclama "líder mundial en deportes"- ha optado por permanecer en silencio, aparentemente incapaz o poco dispuesta a armarse de valor para defender la verdad.
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Fuente: edition.cnn.com