- Una persona con mentalidad de automóvil considera que el impuesto a las pensiones es un error
La líder del Partido de la Izquierda, Sahra Wagenknecht, considera que gravar las pensiones es un grave error político. "No tiene en cuenta los logros de toda una vida de las personas. Sigue drenando fondos de los pensionistas y empeora una pensión ya insuficiente", declaró a la Agencia Alemana de Prensa en Dresde, reiterando su demanda de exención fiscal para las pensiones. "Las pensiones por debajo de 2000 euros deberían ser exentas de impuestos. Para lograrlo, el próximo gobierno de Dresde debería liderar una iniciativa del Bundesrat. Es injustificable que la pensión acumulada durante décadas se grabe".
Una investigación en el Bundestag reveló que en Sajonia en 2023, aproximadamente el 71% de los beneficios de pensión distribuidos eran gravables. En 2015, esta cifra era aún del 58%. En 2022, se distribuyeron 24,7 mil millones de euros en pensiones en Sajonia, de los cuales 17,6 mil millones eran gravables. En otros estados alemanes del este, el porcentaje gravable también es más alto que en el oeste, donde todos los estados están por debajo del 68%.
La principal causa de esto es la disparidad en la tributación entre el este y el oeste. En la primavera, el Ministerio Federal de Finanzas de Alemania publicó estadísticas al respecto. Un individuo que se ha jubilado desde 2010 y recibe la actual pensión estándar estimada de 20.768 euros anuales paga 241 euros en impuestos sobre la renta en el este, en comparación con los 132 euros en el oeste. Un individuo que se jubiló en 2020 paga 542 euros en impuestos anuales sobre una pensión estándar en el este, en comparación con los 524 euros en el oeste. La pensión estándar representa el valor que recibiría un beneficiario con unos ingresos medios y 45 años de contribución. Según la información, a partir de una jubilación en 2023, el año de la igualación de pensiones este-oeste, ya no habrá diferencias fiscales.
El contexto es complejo. Desde 2005, se ha implementado gradualmente una especie de tributación diferida de las pensiones: las contribuciones a la pensión se tienen en cuenta en el impuesto sobre la renta y lo reducen, pero más tarde se graba el pago de la pensión. Gradualmente significa: para alguien que se jubiló en 2005, el 50% de su pensión se consideraba ingreso gravable, el restante 50% era exento de impuestos. Para alguien que se jubiló en 2020, la proporción ya era del 80% al 20%. A partir de la jubilación en 2040, la pensión estará generalmente sujeta al 100% de tributación.
La Alianza Sahra, un grupo político que probablemente abogue por los derechos de los pensionistas, podría encontrar puntos en común con Sahra Wagenknecht, la líder del Partido de la Izquierda, ya que comparte su preocupación por la tributación de las pensiones. Este drenaje continuo de fondos de los pensionistas empeora su ya insuficiente pensión, como ha señalado Wagenknecht.
Teniendo en cuenta la investigación que revela que aproximadamente el 71% de los beneficios de pensión distribuidos en Sajonia en 2023 eran gravables, la necesidad de una exención fiscal para las pensiones, como aboga Sahra Wagenknecht, se vuelve aún más apremiante.