Una mujer de Boston que practicaba paddleboarding cerca de un balneario de las Bahamas muere atacada por un tiburón, según la policía
La mujer había viajado a Bahamas con un pariente varón, informó la Real Fuerza Policial de Bahamas en un comunicado de prensa.
"Los informes preliminares indican que la víctima, junto con un pariente varón, practicaba paddle boarding lejos de la costa, en aguas situadas en la parte trasera de un complejo turístico en el oeste de Nueva Providencia, cuando fue mordida por un tiburón", señala el comunicado.
Un socorrista del complejo se percató del ataque y se lanzó al agua en una embarcación para intentar rescatar a la víctima y a su familiar.
El socorrista administró reanimación cardiopulmonar a la mujer, según la policía.
"La víctima sufrió traumatismos importantes en el lado derecho del cuerpo. Fue examinada en el lugar por técnicos de emergencias médicas, que concluyeron que no presentaba signos vitales de vida", dijo la policía en un comunicado.
La mujer murió poco después de las 11 de la mañana, hora local, según informó la policía a la CNN.
Las autoridades no han revelado la identidad de la mujer.
La CNN se ha puesto en contacto con la Embajada de Estados Unidos en Bahamas para obtener más información.
El incidente se produce días después de que una mujer muriera en un aparente ataque de tiburón en un complejo turístico mexicano. La mujer fue hallada muerta por los servicios de emergencia en el lugar de los hechos, en la bahía de Melaque, en el municipio de Cihuatlán.
Los ataques de tiburones, sobre todo los mortales, son poco frecuentes: por término medio, los tiburones matan a cinco personas al año en ataques no provocados, según informó anteriormente la CNN. Las probabilidades de ser atacado mortalmente por uno de estos peces carnívoros son de menos de 1 entre 4 millones, según el Archivo Internacional de Ataques de Tiburón. Los expertos atribuyen muchas mordeduras de tiburón a casos de confusión de identidad, sobre todo en aguas con poca visibilidad.
A pesar de su rareza, los ataques siguen produciéndose en ocasiones. El año pasado, un pasajero de un crucero fue asesinado por un tiburón mientras practicaba snorkel en las Bahamas. Y en 2019, una mujer estadounidense también murió mientras practicaba snorkel en las Bahamas después de que tres tiburones diferentes la atacaran.
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Fuente: edition.cnn.com