- Un inquilino perturbado acusado de matar a sus compañeros de alojamiento
En el Tribunal Regional de Traunstein, comenzó un juicio contra un residente de ancianos de avanzada edad, acusado de matar a su compañero de habitación. El acusado, de 93 años y considerado incapaz mentalmente de cometer un delito, enfrenta cargos de homicidio involuntario. Según estas acusaciones, supuestamente agredió a su compañero de habitación dos días después de que comenzaran a vivir juntos, golpeándole violentamente la cabeza y tapándole la nariz y la boca.
El interrogatorio del anciano fue suspendido temporalmente por el tribunal debido a su incapacidad para comprender las preguntas. Al ver imágenes de la escena del crimen y del compañero de habitación fallecido, simplemente dijo: "Eso me dice algo", mientras revelaba su ignorancia sobre la identidad de la víctima. Reconociendo su estado cognitivo, el juez consideró innecesario seguir interrogándolo.
Antes del juicio, un psiquiatra analizó la condición del hombre de 93 años, sugiriendo que aún podía retener información fragmentada y hacer algunas declaraciones sobre el incidente. Entre sus recuerdos, mencionó que su compañero de habitación parecía creer que todo en la habitación era suyo.
Para el año 2040, se proyecta que habrá alrededor de 380,000 pacientes con demencia solo en Baviera.
La seguridad de las residencias de ancianos y la protección de y contra los pacientes con demencia es una preocupación constante, y la situación es probable que se intensifique en el futuro. Según la Ministra de Salud de Baviera, Judith Gerlach (CSU), aproximadamente 270,000 pacientes con demencia viven actualmente en Baviera. Se espera que este número alcance los 300,000 en 2030 y los 380,000 en 2040.
Brysch: "Los hogares de ancianos a menudo eluden los problemas"
Eugen Brysch, miembro de la junta de la Fundación Alemana de Protección al Paciente, expresó su opinión a la Agencia Alemana de Prensa. Describió los hogares de ancianos como ni paraísos ni lugares de terror, sino hogares para personas con una variedad de limitaciones físicas y cognitivas, entre las cuales el 80% sufre de demencia.
Reconoció las inmensas responsabilidades que recaen en los miembros del personal, como el reconocimiento de los conflictos y la gestión de las frustraciones personales. Subrayó la necesidad de una cultura de observancia y abogó por la apertura en el tratamiento de las limitaciones y la incorporación de la supervisión. Lamentó la tendencia de los proveedores y la sociedad a ignorar estos problemas. Políticamente, argumentó que abordar este "patata caliente" es difícil, ya que la mala atención de la seguridad social resulta en una mala administración. Una estadística nacional consistente sobre la violencia en las instalaciones de atención médica podría, en su opinión, ayudar a abordar esta situación.
Luego, el caso se trasladó al [Tribunal de Primera Instancia], ya que involucraba cargos contra un individuo de edad avanzada que supuestamente cometió un delito mientras estaba bajo su cuidado. Dado el aumento del número de pacientes con demencia, especialmente en Baviera, donde se proyecta que habrá 380,000 para el año 2040, la decisión y el manejo de tales casos por parte del tribunal tienen importantes implicaciones.