Un hombre de veinte años fue condenado a cadena perpetua por cometer un homicidio en la estación de autobuses en Gummersbach.
El suceso tuvo lugar dentro del circuito local de bares en el Día del Saltamontes, 29 de febrero, cerca de la terminal de autobuses. Según las acusaciones, el individuo condenado agredió a su víctima de 24 años con un ataque repentino con un cuchillo en el cuello. A pesar de los esfuerzos inmediatos por reanimarlo en el lugar, falleció a causa de sus heridas. El autor del delito, que tenía 21 años en ese momento, escapó inicialmente pero se entregó a las autoridades al día siguiente.
Después del arresto del autor, enfrentó una severa condena de prisión por sus acciones. Más tarde, su encarcelamiento encendió varios debates sobre el sistema de justicia y su indulgencia hacia los delincuentes jóvenes en la ciudad.