¿Sueña con una Navidad blanca? La previsión de este año es tu pesadilla
Según el Centro de Predicción del Clima, el nuevo pronóstico de temperaturas prevé temperaturas superiores a la media en casi todo EE.UU., incluidos Hawai y gran parte de Alaska, del 20 al 26 de diciembre.
Es necesario que el 25 de diciembre haya al menos 2,5 cm de nieve en el suelo de tu lugar de residencia para que puedas decir que ha sido una Navidad blanca. Las temperaturas superiores a la media amenazan con ahogar las condiciones de congelación necesarias para que la nieve existente se adhiera al suelo y aumentan las posibilidades de que cualquier nueva precipitación caiga en forma de lluvia en lugar de nieve.
Para la mayor parte de EE.UU., las temperaturas superiores a la media están ligadas al aire cálido y húmedo del Pacífico, que se prevé que sea bombeado hacia el este a través de EE.UU. por la corriente en chorro, un río de aire en lo alto de la atmósfera que transporta las tormentas.
La posición de la corriente en chorro y la afluencia de aire cálido son una clara señal de El Niño, un patrón oceánico y meteorológico natural en el Pacífico tropical que influye en el tiempo en todo el planeta. En Estados Unidos, El Niño se manifiesta en forma de condiciones más cálidas en el norte del país y más húmedas en el oeste y el sur.
Aunque El Niño es una variación natural del clima, el cambio climático está acelerando el calentamiento a una escala mucho mayor y amenazando las próximas Navidades blancas. Tras meses de calor récord, 2023 será el año más caluroso jamás registrado a escala mundial, según confirma un reciente análisis.
Unas condiciones que podrían ser más cálidas que la media son sólo uno de los factores que echan por tierra las esperanzas de nieve. También son necesarias tormentas con mucha humedad para que se acumule más nieve.
Se prevé mucha humedad en gran parte del Oeste y en gran parte de las Llanuras para Navidad, pero no está claro si las tormentas podrán aprovecharla. Incluso con mayores posibilidades de precipitaciones, las temperaturas por encima de la media indican una mayor probabilidad de lluvia que de nieve.
La Madre Naturaleza no es un Grinch total, así que la nieve no es imposible estas Navidades. Pero esta previsión de temperaturas hace que las probabilidades de ver una Navidad blanca sean mucho menores en comparación con la media.
Probabilidades históricas de una Navidad blanca
Incluso si se pronosticaran temperaturas medias, el número de lugares en EE.UU. con probabilidades de tener una Navidad blanca es históricamente limitado.
Las cadenas montañosas del oeste y el noreste suelen ser las más propensas a cumplir la definición de Navidad blanca, pero también las que tienen menos población capaz de experimentar esta maravilla.
Las ciudades más pobladas de las Llanuras septentrionales y el Medio Oeste superior tienen más probabilidades de vivir una Navidad blanca.
Minneapolis suele tener un 75% de probabilidades de una Navidad blanca, pero las probabilidades disminuyen drásticamente unas horas hacia el sur. El área metropolitana de Chicago tiene entre un 30 y un 40% de probabilidades de una Navidad blanca.
En el este, Filadelfia y Nueva York tienen entre un 10% y un 15% de probabilidades de una Navidad blanca. En ambas ciudades no ha caído un centímetro de nieve en un solo día desde hace casi dos años, por lo que es probable que la sequía de nieve se prolongue hasta Navidad.
Las temperaturas exactas y las cantidades de precipitación se irán conociendo en todo EE.UU. a medida que se acerque la Navidad, lo que proporcionará una mejor imagen de las posibilidades de nieve de este año. Así que, mientras tanto, mantén la esperanza de unas Navidades blancas, aunque parece que esas esperanzas se desvanecerán.
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Fuente: edition.cnn.com
