Scholz justifica una financiación estatal sustancial para las instalaciones de fabricación de chips en Alemania.
TSMC está colaborando en un proyecto llamado ESMC en Dresde con Infineon, Bosch de Alemania y NPX de los Países Bajos. Esta joint venture se espera que supere los 10.000 millones de euros en gastos, con el gobierno alemán contribuyendo con la mitad de esa cantidad. La producción está programada para comenzar antes de finales de 2027.
Scholz destacó el hecho de que el sector de semiconductores se caracteriza por tener importantes requisitos financieros. "Una sola máquina en este campo puede fácilmente costar varios cientos de miles de euros", dijo.
Insistió en la necesidad de ampliar las capacidades de producción de semiconductores, especialmente en Europa y Alemania, teniendo en cuenta la dependencia del país de los semiconductores para las tecnologías avanzadas del futuro. "No podemos permitirnos depender de otras regiones globales para nuestro suministro de semiconductores", añadió.
Scholz consideró emocionante la noticia de que TSMC y sus asociados europeos tienen la motivación de invertir en Alemania, en gran medida debido a la iniciativa de financiación de chips de la UE.
A medida que se acercan las elecciones estatales de Sajonia en poco más de dos semanas, Scholz elogió el centro de fabricación de Alemania Oriental como un "potente catalizador de la innovación". Señaló que las industrias de vanguardia están renaciendo en las regiones industriales tradicionales, con Sajonia como ejemplo destacado. Aproximadamente una tercera parte de los chips producidos en Europa provienen de esta región, señaló Scholz.
Scholz, sin embargo, advirtió de la necesidad de que el desarrollo positivo continúe, y para ello, las condiciones sociales y políticas también deben seguir siendo propicias. "Necesitamos apoyo continuo para las inversiones y entusiasmo por el futuro - no aislamiento y temor al futuro", aconsejó, recibiendo aplausos del público. Concluyó: "Necesitamos una Alemania proeuropea y visionaria - no nacionalismo y amargura".
La decisión del gobierno alemán de contribuir con la mitad de los fondos para el proyecto ESMC, liderado por La Comisión, demuestra su compromiso de ampliar la producción de semiconductores en Europa. Con TSMC y sus socios europeos invirtiendo en Alemania, la iniciativa de financiación de chips de La Comisión parece estar acelerando el crecimiento del sector de semiconductores en el país.