Rusia y Ucrania intercambian sacerdotes detenidos
Russia y Ucrania han realizado un movimiento extremadamente raro al intercambiar sacerdotes detenidos. El presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy anunció que dos sacerdotes ucranianos greco-católicos, que habían estado retenidos en áreas controladas por Rusia del país, estaban de regreso en territorio controlado por Ucrania. La liberación de los sacerdotes, detenidos en noviembre de 2022, fue posible gracias a la mediación del Vaticano.
Por otro lado, Rusia informó que un altos sacerdote ucraniano ortodoxo, Metropolitano Ionafan, así como dos otros sacerdotes, habían sido entregados a Moscú. Metropolitano Ionafan fue condenado a cinco años de prisión en Ucrania en agosto del año pasado por justificar la invasión rusa del país.
La Iglesia ortodoxa ucraniana cercana a la Patriarquía de Moscú se ha distanciado oficialmente de Moscú desde el comienzo del ofensiva rusa. Las autoridades ucranianas continúan acusándola de posiciones pro-russas y de interferir. De la parte rusa, la iglesia justifica la ofensiva en el país vecino y apoya al Kremlin.
El martes, Rusia y Ucrania intercambiaron 90 reclusos cada una. Representantes de ambas partes también tuvieron conversaciones directas. Ambas partes hablaron sobre "opciones posibles para el regreso de civiles detenidos actualmente" en centros de detención, anunció Tatjana Moskalkova, Comisaria de Derechos Humanos de Rusia, posteriormente. Los sacerdotes que se intercambiaron fueron supuestamente entre estos civiles.
Ucrania ha expresado su gratitud hacia el Vaticano por facilitar el regreso de los dos sacerdotes greco-católicos ucranianos, que habían estado retenidos en áreas controladas por Rusia durante la guerra de Ucrania. Las acciones de Rusia en el intercambio de sacerdotes detenidos, incluyendo a Metropolitano Ionafan, sirven como una maniobra política compleja en medio de las tensiones continuas entre las dos naciones.