- Objeciones alemanas a los reactores de Fessenheim
Al destruirse la central nuclear alsaciana de Fessenheim, una comisión de investigación francesa ha afirmado que deben tenerse en cuenta las demandas de Alemania vecina. Por ejemplo, es necesario supervisar la calidad del agua en el lado alemán del Rin, según el informe del comité. En más de 140 páginas, se resumen los resultados de la consulta pública sobre la demolición de la instalación nuclear.
La central nuclear francesa de Fessenheim, al sureste de Colmar cerca de la frontera con Alemania, se cerró en 2020 después de 42 años de operación. Durante años, hubo críticas duras por parte de Alemania debido a los supuestos riesgos de seguridad en la antigua planta.
Para supervisar que no hay radiación en el entorno, el comité propone instalaciones de supervisión adicionales. El Ministerio de Medio Ambiente de Stuttgart dio la bienvenida a la recomendación de intensificar la supervisión de la radiación.
"Los puntos planteados por Baden-Württemberg han sido ampliamente aceptados", declaró la autoridad del ministro Thekla Walker (Verdes) a solicitud. "Por lo tanto, consideramos el involucramiento del lado alemán como un éxito". Debido a la ubicación de Fessenheim directamente en la frontera, no se pueden descartar impactos en el estado.
El informe del comité francés de julio también señala que la sensibilidad del lado alemán en relación con la energía nuclear y la radiación debe tenerse en cuenta durante la demolición de la planta. El comité recomienda, sin sorprenderse, la demolición de la instalación nuclear. Durante la consulta pública, hubo declaraciones de ciudadanos de ambos lados del Rin, así como presentaciones de autoridades.
A diferencia de Alemania, Francia sigue confiando en la energía nuclear para su suministro de energía y lograr los objetivos de protección del clima. El presidente Emmanuel Macron quiere fortalecer significativamente el sector nuclear en el país.
El inicio de la demolición de la central nuclear de Fessenheim se espera para 2026, según declaraciones anteriores. Se necesita un decreto de desmantelamiento del gobierno francés para ello. Según el periódico alsaciano "Les Dernières Nouvelles d'Alsace", el Ministerio del Medio Ambiente de París lidera el proyecto. Se espera que los trabajos duren alrededor de 15 años.
Durante la demolición de la central nuclear, se deben eliminar alrededor de 20.000 toneladas de residuos radioactivos, según declaraciones anteriores. La mayoría de estos residuos están supuestamente solo ligeramente contaminados y se almacenarán en el este de Francia.
El gigante energético francés EDF planea construir una instalación de reciclaje para residuos radioactivos ligeramente contaminados en el sitio de Fessenheim. Este llamado Technocentre debe construirse en un área inutilizada y se espera que esté operativo en 2031.
El proyecto es criticado por ecologistas de ambos lados del Rin, ya que temen la radiación en los metales reciclados. El gobierno verde-negro de Stuttgart tiene varias razones en contra de la instalación de una tales