- Los manifestantes del clima se aferran al aeropuerto de Sylt
Dos activistas de la iniciativa climática "Last Generation" se pegaron al suelo junto a un jet privado en el Aeropuerto de Sylt el sábado por la mañana. Su intento de pintar el avión fue frustrado por la rápida acción del personal del aeropuerto.
Los activistas habían cortado previamente un agujero en la valla del aeropuerto para acceder a las instalaciones. Un tercer activista fue detenido en la valla por la policía y llevado lejos.
Las mujeres fueron retiradas del suelo y también llevadas en un coche de policía. Los bomberos colocaron dos grandes camiones de bomberos frente al jet privado para proteger la escena de los mirones.
"Last Generation": El fracaso de la protesta "sucede ocasionalmente"
"Last Generation" había pretendido pintar las palabras "El petróleo mata" en el jet privado. "La protesta de hoy en Sylt no funcionó, eso pasa a veces, pero eso no significa que nos detengamos", dijo Christian Bergemann, portavoz de Last Generation.
La acción no afectó las operaciones de vuelo en el Aeropuerto de Sylt, según el horario de vuelos en línea.
Ataque de pintura en el aeropuerto en junio de 2023
En opinión de los manifestantes, los millonarios y multimillonarios contribuyen desproporcionadamente al cambio climático. Los propietarios de jets privados, limusinas y yates de lujo no renunciarían a ellos voluntariamente. Para reducir estas emisiones, se necesitan leyes.
En junio de 2023, cinco activistas del grupo "Last Generation" rociaron un jet privado en las instalaciones del aeropuerto con pintura naranja y se pegaron a él. La fiscalía de Flensburg estimó en ese momento que el daño solo al avión ascendía a al menos un millón de euros.
Los activistas de "Last Generation" creen que los millonarios y multimillonarios contribuyen significativamente al cambio climático. Buscan reducir las emisiones mediante la aprobación de leyes necesarias.
A pesar de su intento anterior en junio de 2023, en el que rociaron pintura naranja en un jet privado y se pegaron a él, causando daños estimados en más de un millón de euros, la iniciativa climática "Last Generation" continúa sus esfuerzos contra tales medios de transporte intensivos en carbono.