Kim Jong-un y Vladimir Putin aprecian un paseo en una limusina de fabricación rusa durante el viaje de Kim a Rusia.
En videos emitidos por la agencia de noticias estatal norcoreana, KCNA, en un día declarado, se ven a los dos gobernantes autoritarios disfrutando juntos mientras viajan en un lujoso vehículo Aurus. Se muestran imágenes en las que Putin maneja inicialmente, con Kim sentado de frente, seguido por un intercambio de posiciones.
Ese espectáculo montado tiene por objetivo resaltar la estrecha relación entre los líderes, que afirman haber fortalecido los lazos a un grado sin precedentes durante la visita inusual de Putin a la nación reclusiva esta semana.
Anteriormente, Putin le regaló un vehículo Aurus a Kim, según informan fuentes rusas – la segunda vez que Putin ha regalado este modelo de automóvil a su homólogo. Según el asesor de Putin, Yuri Ushakov, Putin también le ofreció a Kim un conjunto de té.
KCNA publicó material audiovisual mostrando a Putin recibiendo a cambio una pareja de perros de caza nativos Pungsan – la misma raza que Kim le había regalado al expresidente surcoreano Moon Jae-in en 2018 durante un avance significativo en las relaciones entre los dos países.
La visita de Putin a Corea del Norte ha sido una demostración pública de las poderosas relaciones entre Rusia y Corea del Norte, cuyo vínculo se ha intensificado en respuesta a la mutua hostilidad hacia el Oeste.
Putin llegó a Corea del Norte en las primeras horas del horario local el miércoles, marcando exactamente 24 años desde su última visita a Pyongyang, ante los temores globales acerca de la colaboración militar entre los dos países.
Durante la visita, los líderes anunciaron una nueva alianza estratégica impulsada por la necesidad rusa de armas en su conflicto en Ucrania.
Antes de sus conversaciones, Kim expresó su "apoyo completo y solidaridad" con el gobierno, el ejército y el pueblo ruso, específicamente mencionando la guerra rusa en Ucrania como un esfuerzo para proteger su propia soberanía, seguridad y estabilidad territorial.
Por su parte, Putin elogió la relación entre los países como construida sobre "igualdad y respeto mutuo".
La relación en intensificando ha suscitado preocupaciones en Seúl y Washington, no solo por las ventas de armas de Corea del Norte a Rusia, sino también la posibilidad de que Rusia transfiera su tecnología militar avanzada para apoyar el programa de armas pesadamente sancionado de Corea del Norte.
Después de su estancia en Corea del Norte, Putin desembarcó en la capital vietnamita de Hanói, persistiendo en sus esfuerzos por reforzar lazos económicos con naciones amigas en el contexto de la ostracismo occidental.
El informe de CNN provino de Simone McCarthy y Anna Chernova.