HyFiT - Capacidad de los camiones de diésel con calefacción neutra en CO2
Puede llevar años que el tráfico de camiones se electrifique y así se vuelva neutral en términos de clima. Un nuevo biocombustible llamado HyFIT podría al menos reducir las emisiones de CO2 de los vehículos mientras tanto.
El tráfico pesado se volverá más respetuoso con el clima en el futuro con baterías gigantes y estaciones de carga de megavatios o celdas de combustible. Los investigadores de RWTH Aachen, ETH Zurich y el Instituto Max Planck han mostrado ahora otra forma de reducir el CO2 con el combustible sintético y mezclado con alcohol HyFiT.
HyFiT consiste principalmente en diésel sintético, que se puede obtener a partir de biomasa o CO2 mediante la síntesis de Fischer-Tropsch (corto: síntesis FT). A continuación, se le añade alcohol, en una proporción que puede variar del 20 al 40 por ciento. En comparación con el diésel convencional, las emisiones locales de CO2 se pueden reducir en un tres a cinco por ciento, y las partículas en suspensión en hasta un 70 por ciento.
Según el Instituto Max Planck, el combustible HyFiT se puede ajustar para que produzca menos partículas en suspensión y óxidos de nitrógeno que un diésel que cumpla con el futuro estándar Euro-7 cuando se quema.
El combustible podría ser competitivo bajo ciertas condiciones
En términos de impacto climático, el combustible producido a partir de recursos renovables sería competitivo con los trenes de potencia eléctricos sin emisiones en el sector de los camiones, según los investigadores, siempre y cuando se tenga en cuenta el balance de CO2 global de los vehículos eléctricos, desde la producción de baterías hasta la participación de CO2 en la mezcla eléctrica alemana.
Según su estudio publicado en la revista "Nature" a principios de julio, HyFiT cumple con los estándares de combustible a nivel mundial y es compatible con la infraestructura y los materiales de sellado existentes.
El proceso de Fischer-Tropsch es un método establecido para producir combustible sintético y se utilizó en Alemania durante la Segunda Guerra Mundial para producir diésel a partir del carbón. Se desarrolló en Alemania en 1925 para producir combustible a partir del carbón. Para HyFit, se utiliza biomasa en lugar del carbón.
Otros vehículos podrían beneficiarse potencialmente del uso de HyFIT, ya que puede reducir significativamente sus emisiones locales de CO2 y partículas en suspensión. Sin embargo, la electrificación de otros vehículos para la neutralidad climática aún puede tardar años, lo que requiere soluciones alternativas como HyFIT mientras tanto.