Hunter, el hijo de Biden, acusado de delitos fiscales
La justicia estadounidense lleva años investigando a Hunter Biden. De hecho, el hijo del presidente admitió en junio la posesión ilegal de un revólver y delitos fiscales en el marco de un acuerdo con la fiscalía federal de Delaware. A cambio de una declaración de culpabilidad en ambos casos, sólo iba a recibir una sentencia indulgente y también se habría librado de un juicio.
Sin embargo, el acuerdo se vino abajo en julio después de que el juez encargado cuestionara su contenido. En agosto, el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, nombró investigador especial a David Weiss, el fiscal federal de Delaware que ya investigaba a Hunter Biden desde 2019.
Este último presentó por primera vez cargos contra Biden en Delaware a mediados de septiembre por posesión ilegal de armas de fuego... y ahora una acusación en un tribunal federal de Los Ángeles, en el estado de California, por delitos fiscales. Biden, abogado y empresario que ahora trabaja como artista, vive en Los Ángeles desde 2018.
Hunter Biden también está en el punto de mira de la oposición republicana. Le acusan de haber aprovechado en el pasado la importante posición de su padre como vicepresidente de Barack Obama (2009 a 2017) para hacer negocios en Ucrania y China. Las acusaciones sirven de base a los republicanos para iniciar un procedimiento de destitución contra el presidente Biden. Le acusan de estar implicado en los negocios de su hijo en el extranjero y de mentir a la opinión pública.
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Fuente: www.stern.de