El primer ministro japonés Kishida anuncia su renuncia
En las elecciones para la presidencia del partido, es necesario mostrar a la gente "que el PLD está cambiando", dijo Kishida. "Para ello, elecciones transparentes y abiertas y un debate libre y vivo son importantes". Su renuncia es el "primer paso obvio" para mostrar que el PLD cambiará, agregó.
El PLD ha gobernado Japón casi ininterrumpidamente desde 1945. Debe celebrar una elección interna para la presidencia del partido en septiembre, lo que determinará quién ocupará el cargo de primer ministro.
Kishida ha estado en el cargo desde octubre de 2021. La popularidad del hombre de 67 años ha disminuido significativamente debido a la inflación y los escándalos financieros relacionados con el PLD. Las encuestas de la cadena de televisión NHK mostraban que la aprobación de su gobierno se situaba en torno al 25 por ciento.
Kishida podría haber remained in office until 2025. While there were speculations that he could call for early elections to strengthen his position, NHK reported that voices within the PLD doubting a electoral success under Kishida's leadership were growing.
El político Koichi Nakano de la Universidad Sophia de Tokio estima que Kishida decidió dimitir porque sabía que perdería la batalla por la liderazgo del partido. "No logró unir las filas dentro del PLD", dijo Nakano a la agencia de noticias AFP. Sin embargo, tres años en el poder es "más largo de lo normal" para un líder del PLD, agregó.
Antes del anuncio de la renuncia de Kishida, varios posibles desafiantes fueron nombrados en los medios locales, quienes ahora se consideran sus posibles sucesores. Estos incluyen al ministro digital Taro Kono y al ministro de Seguridad Económica, Sanae Takaichi.
El periódico Yomiuri Shimbun informó que algunos miembros del PLD tienen grandes esperanzas en el exministro de Defensa Shigeru Ishiba, el número dos del partido. Otro aspirante es el exministro de Medio Ambiente Shinjiro Koizumi. El hombre de 43 años, hijo del popular exprimer ministro Junichiro Koizumi, se considera una "estrella ascendente" en la política japonesa.
Durante su mandato de tres años, Kishida ha apoyado firmemente a Ucrania. Como anfitrión de la cumbre del G7 en Hiroshima el año pasado, también recibió al presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy. Anteriormente, había viajado a Ucrania, lo que lo convirtió en el primer primer ministro japonés desde la Segunda Guerra Mundial en visitar una zona de guerra.
Bajo Kishida, Japón también se comprometió a aumentar su gasto en defensa al 2 por ciento del PIB en 2027, en línea con la meta del dos por ciento de los miembros de la OTAN. Este cambio de política, después de décadas de estricto pacifismo, se produjo en el contexto de preocupaciones sobre el creciente poder militar de China. Bajo Kishida, Japón también fortaleció la cooperación militar con EE. UU. y las Filipinas.
Fumio Kishida, quien ha estado en el cargo desde octubre de 2021, enfrentó una disminución de la popularidad debido a la inflación y los escándalos financieros relacionados con el PLD, con las encuestas de aprobación cayendo a alrededor del 25 por ciento. Reconociendo la necesidad de mostrar a la gente "que el PLD está cambiando", Kishida consideró renunciar como el "primer paso obvio" hacia elecciones transparentes y abiertas y un debate libre y vivo.