- El Instituto Loeffler confirma la fiebre catarral ovina en el Sarre
El Instituto Friedrich-Loeffler (FLI) ha confirmado tres casos de enfermedad de la lengua azul en Sarre. Las muestras examinadas por el laboratorio nacional de referencia para la enfermedad de la lengua azul en FLI procedían de una granja de ganado y dos explotaciones ovinas, según un portavoz del Instituto Federal de Investigación de Salud Animal en Greifswald. No se pudo determinar el número exacto de animales afectados. No había detalles iniciales sobre la ubicación exacta de los brotes.
Establecimiento de Zonas de Restricción
El miércoles se detectaron casos de enfermedad de la lengua azul en tres operaciones en Sarre que involucraban ganado y ovejas. La confirmación final de FLI aún estaba pendiente. El brote ha llevado al establecimiento de zonas de restricción como medida legalmente requerida, dijo el portavoz.
Después de la confirmación oficial del brote, solo se puede transportar ganado susceptible al virus, principalmente ganado, ovejas y cabras, dentro de Alemania y la UE bajo ciertas condiciones, según el Ministerio de Medio Ambiente de Sarre. Estas y otras medidas de control de enfermedades se están implementando por la Oficina Estatal de Protección al Consumidor (LAV).
No hay riesgo de infección para los seres humanos
Según la información del Ministerio de Medio Ambiente, no hay riesgo de infección para los seres humanos. Se pueden consumir carnes y productos lácteos sin preocupaciones.
La enfermedad de la lengua azul es una enfermedad viral notificable transmitida por pequeñas moscas chupasangre, informó el ministerio. Además del ganado y las ovejas, también son susceptibles las cabras, los llamas y los alpacas. Los animales pueden protegerse de la enfermedad mediante la vacunación.
Las medidas implementadas por LAV también incluyen inspecciones de salud regulares de los animales dentro de las zonas de restricción para monitorear la propagación de la enfermedad de la lengua azul, centrándose en animales susceptibles como el ganado, las ovejas y las cabras. Para garantizar la salud animal y prevenir nuevos brotes, se deben implementar medidas de bioseguridad estrictas en las granjas afectadas.