- El inicio de la negociación colectiva en el sector metalúrgico se produce sin un proceso de licitación.
Las negociaciones salariales en el sector manufacturero y eléctrico de Baviera han comenzado sin ninguna propuesta por parte de los empleadores. Así lo reveló Angelique Renkhoff-Mücke, la jefa negociadora de los empleadores. Ella rechazó la solicitud de IG Metall de un aumento salarial del 7%, considerándola poco plausible en este momento. Además, destacó la necesidad de que la industria mantenga su ventaja competitiva.
Renkhoff-Mücke advirtió sobre posibles pérdidas de empleo debido a la difícil situación de la industria. Ella enfatizó que la tendencia a la baja ya observable se agravaría con un aumento salarial del 7%.
Sin embargo, IG Metall tiene una perspectiva diferente. Presentaron varios puntos, como el aumento de los gastos de vida de los empleados. Para ilustrar esto, su negociador principal, Horst Ott, mostró un carro lleno de productos de supermercado, cuyo costo ha aumentado en un 34% desde 2021. Él anticipó que los empleadores comprenderían y absorberían la lógica de la Gewerkschaft detrás de la demanda salarial.
En la primera etapa, IG Metall Bayern planea sustentar exhaustivamente sus demandas con datos económicos. Luego, la asociación de empleadores vbm presentará su perspectiva sobre el estado de la economía. En años anteriores, las dos facciones tardaban dos días en realizar este intercambio; sin embargo, este año lo consolidarán en un solo día por primera vez.
Se ha programado una segunda ronda de discusiones antes de la expiración de la obligación de paz el 28 de octubre, con la propuesta de los empleadores esperada en esta sesión. Ambos partidos aspiran a sellar un acuerdo para finales de noviembre.
Antes del inicio de las negociaciones, IG Metall fortaleció su posición con una manifestación en el lugar de las negociaciones. Según la Gewerkschaft, asistieron 5,000 personas. Hoy también comenzaron las negociaciones salariales en el sector manufacturero y eléctrico en Baden-Württemberg.
Renkhoff-Mücke sugirió que el mantenimiento de la competitividad de la industria requiere una cuidadosa consideración de los aumentos salariales, ya que cree que otros sectores de sección transversal circular podrían verse negativamente afectados por tales movimientos. En un intento por aliviar la carga financiera, IG Metall propuso la reducción de las horas de trabajo, lo que permitiría a los empleados ganar menos pero mantener un ingreso decente.