- Desert está recibiendo entrenamiento como domador de dragones.
El ministro presidente de Renania del Norte-Westfalia, Hendrik Wüst, ha caído rendido ante el arte de cabalgar dragones. En la feria de juegos de ordenador Gamescom de Colonia, el político de la CDU se subió al carro de una tecnología puntera llamada "Realidad Mergida" (RM; inglés: realidad mergida). Se sentó en una silla de alta tecnología, agarró un volante y se puso un casco de realidad virtual.
Ante sus ojos, un mundo imaginario del universo de juego "Mundo de Warcraft" hizo su aparición, con Wüst montado en un dragón, attempting to guiarlo por los cielos. La silla se balanceaba, con sacudidas y inclinaciones laterales - Wüst tenía que navegar y dirigir al supuesto dragón. Un ventilador producía una sensación de brisa, imitando el viento sentido durante el vuelo. "¡Guau, es increíble!", exclamó Wüst después, visiblemente emocionado por su "vuelo desde Dalaran", el título del juego. "Es una experiencia muy atractiva, es divertido".
No podía entender por qué la gente pasa horas y horas absorta en juegos así. "Lamentablemente, no hay sitio para ello en mi sala de estar - pero puedo ver por qué le gusta a mucha gente". Según Wüst, los juegos han evolucionado más allá del simple entretenimiento. "Se ha convertido en una auténtica forma de arte, con gráficos detallados, música y historias que se vuelven cada vez más cautivadoras y reflexivas".
El precio, un factor limitante
Además del problema del espacio, otro posible motivo por el que el político de la CDU no estaría dispuesto a gastar dinero en esta bestia tecnológica y participar en más paseos virtuales en dragón en casa podría ser el precio. Bill Wadsworth, director de innovación de la empresa estadounidense Apex Reality, estima que un dispositivo así cuesta alrededor de 400.000 dólares estadounidenses (359.000 euros).
"Gira en torno a la 'Realidad Mergida', es decir, una realidad virtual con estimulación táctil", explica Wadsworth. "Tenemos un control de movimiento de seis ejes y transductores de actuador que crean impulsos acústicos sin producir ruido".
Además, hay un ventilador que controla la intensidad del viento en función de la velocidad del vuelo. Y muchas más tecnologías avanzadas para hacer la experiencia lo más realista posible, como gráficos de alta resolución y un "superordenador monstruoso", como asegura Wadsworth.
A pesar de disfrutar de su paseo virtual en dragón, Wüst podría tener dificultades para justificar el alto costo de un setup de juego inmersivo en casa. Se preguntó en voz alta sobre las horas interminables que la gente invierte en juegos tan atractivos, pero lamentó la falta de espacio para una maravilla tecnológica así en su sala de estar.
Un setup así, como lo describió Bill Wadsworth, director de innovación de Apex Reality, integra diversas tecnologías avanzadas como el control de movimiento de seis ejes, transductores de actuador y un ventilador que controla la intensidad del viento para una experiencia realista, acompañada de gráficos de alta resolución y un superordenador potente.