Culo con ojos: el vagabundo gusano desarrolla un cerebro y puede ver
A un gusano que vive en el mar le crecen ojos y cerebro en el culo. Los segmentos traseros de estos animales de hasta nueve centímetros de longitud también desarrollan sus propias antenas y cerdas natatorias, según informa un equipo de investigación japonés en la revista "Scientific Reports". En un momento dado, el segmento posterior se separa del resto del cuerpo y se aleja nadando como una unidad reproductora de cuatro ojos en busca de pareja.
Ya se sabía por la especie de gusano Megasyllis nipponica que la parte trasera del cuerpo -llena de huevos o esperma- se desprende para desovar. El equipo dirigido por Toru Miura, de la Universidad de Tokio, ha analizado ahora este proceso en detalle. La cabeza con ojos y antenas se forma mientras los segmentos siguen unidos al cuerpo original. Antes de que el vástago se desprenda, también desarrolla una especie de cerebro con el que puede sentir y actuar de forma independiente.
El equipo de investigadores informa de que los apéndices independientes tienen incluso un aparato digestivo sencillo. Sus dos pares de ojos son aún mayores que los de la madre, probablemente para percibir mejor la luz. Sus cortas antenas se utilizan probablemente para recibir las llamadas feromonas, sustancias mensajeras especiales de otros vástagos que son potenciales parejas.
Según los investigadores, aún no se puede decir con certeza qué determina que los huevos o el esperma se almacenen en el extremo posterior del gusano. Lo que está claro, sin embargo, es que el proceso no es único: los gusanos pueden desarrollar más vástagos.
Pero, ¿por qué el gusano y su unidad reproductora toman caminos separados? El equipo de investigadores supone que un animal puede propagarse mejor a través de vástagos separados en distintos lugares. Además, la madre se salva cuando la unidad reproductora inicia su arriesgada búsqueda de pareja y se convierte en presa en el proceso.
Fuente: www.dpa.com