Colonizar Marte podría ser peligroso y ridículamente caro. Elon Musk quiere hacerlo de todos modos
Musk, consejero delegado e ingeniero jefe de la empresa, se refiere a sus ambiciones interplanetarias más como un protagonista de ciencia ficción con una vocación moral que como un empresario con un plan de negocio disruptivo.
"Si ocurre algo terrible en la Tierra, ya sea obra humana o natural, queremos tener un seguro de vida para toda la humanidad", dijo Musk durante una conferencia virtual sobre Marte el 31 de agosto. "Luego, está el tipo de emoción y aventura".
Los planes de SpaceX para un asentamiento en el Planeta Rojo plantean numerosas cuestiones tecnológicas, políticas y éticas. Uno de los obstáculos más difíciles puede ser también el financiero: Ni siquiera Musk se ha aventurado a hacer una estimación del coste total.
El último programa espacial que se acercó a las ambiciones de viaje interplanetario de Musk fue el programa Apolo de la NASA, el esfuerzo de mediados del siglo XX que llevó seis naves espaciales y 12 astronautas a la Luna. Apolo costó más de 280.000 millones de dólares actuales y, en algunos años, la NASA se llevó más del 4% de todo el presupuesto nacional. La agencia espacial, que en años más recientes ha recibido menos de la mitad del 1% del presupuesto federal, está trazando sus propios planes para devolver seres humanos a la Luna y, con el tiempo, un camino a Marte.
Pero la agencia tampoco ha indicado cuánto podría costar esto último.
El patrimonio personal de Musk se ha disparado hasta unos 100.000 millones de dólares -al menos sobre el papel- gracias en gran parte a una serie de acciones y premios en acciones de su empresa de coches eléctricos, Tesla. Musk también ha dicho en repetidas ocasiones que espera que los beneficios de otros negocios de SpaceX, incluida una empresa de Internet por satélite que actualmente está en fase beta, ayuden a impulsar el desarrollo de su cohete a Marte. SpaceX también ha recaudado casi 6.000 millones de dólares de bancos e inversores de capital riesgo, convirtiéndose en una de las empresas privadas más valoradas del mundo, según la firma de datos Pitchbook. Es de suponer que al menos algunos inversores querrán algún día retirar su dinero.
Y eso nos lleva a preguntarnos: ¿Se puede ganar dinero en Marte?
Beneficios interplanetarios
SpaceX aún está a muchos, muchos años de desarrollar toda la tecnología que requeriría un asentamiento en Marte. La empresa se encuentra en las primeras fases de desarrollo de su Starship, un enorme sistema de cohetes y naves espaciales con el que Musk espera transportar carga y convoyes de personas a través del vacío de al menos 30 millones de millas entre la Tierra y Marte. Musk ha calculado que el desarrollo de la Starship costará hasta 10.000 millones de dólares, y declaró el 31 de agosto que SpaceX intentará lanzar "cientos" de satélites a bordo de la Starship antes de confiarle vidas humanas.
Si resulta capaz de realizar el viaje a Marte, los colonos necesitarán hábitats herméticos que les protejan del aire tóxico y de la radiación mortal que cae sobre su superficie.
"No es para los débiles de corazón", dijo Musk. "Es muy probable que mueras, y va a ser duro... Más vale que sea muy glorioso si sale bien".
Pero al menos durante los primeros 100 años de presencia humana en Marte, la situación económica será dudosa, dijo Michael Meyer, científico jefe del Programa de Exploración de Marte de la NASA, que recientemente lanzó el vehículo explorador Perseverance para seguir estudiando el planeta robóticamente.
Musk tiene un plan para hacer de Marte un destino atractivo para vivir a largo plazo: La terraformación, un escenario hipotético en el que los humanos hacen que Marte se parezca más a la Tierra bombeando gases a la atmósfera. Sería un intento de utilizar los mismos gases de efecto invernadero que causan la crisis climática en nuestro planeta para hacer la atmósfera de Marte más densa, más cálida y más hospitalaria para la vida. Musk ha promovido la idea de que el proceso podría iniciarse lanzando bombas nucleares sobre el planeta.
La idea de la terraformación surgió de científicos que barajaban ideas, dijo Meyer, pero no de alguien que pensara que era algo que los humanos podían o debían hacer.
"Fue un ejercicio intelectual", dijo Meyer. Pero apenas hay oxígeno en la atmósfera de Marte. Y hay una cantidad infinitesimal de agua, lo que significa que será extremadamente difícil cultivar, y mucho menos crear un ciclo del agua en todo Marte. Ni siquiera está claro si hay suficientes recursos en Marte para hacer posible la terraformación.
Musk, en una foto publicada en su Instagram, lleva una de las camisetas "Occupy Mars" de SpaceX.
"Creo que 'Total Recall' tiene la idea correcta", bromeó. "Necesitarías usar algo de tecnología alienígena".
Musk también ha reconocido que la terraformación será extremadamente intensiva en recursos. Pero el concepto está arraigado en la tradición de SpaceX, hasta el punto de que la empresa vende camisetas que dicen "Nuke Mars" y "Occupy Mars".
Es frecuente ver a Musk con una.
Valores y valoraciones
Según Meyer, no se conocen recursos en Marte lo suficientemente valiosos como para extraerlos y venderlos a empresas terrestres. "Parte de la razón por la que los científicos están interesados en Marte es que está hecho prácticamente de lo mismo que la Tierra", dijo a CNN Business.
Musk ha sugerido anteriormente que está de acuerdo, señalando que los recursos de Marte probablemente sólo serían valiosos para los colonos que esperan construir industrias en el planeta. Hace ocho años señaló que el único "intercambio económico" entre los habitantes de Marte y la Tierra sería la "propiedad intelectual".
Dejando a un lado la ambición de hacer dinero, la idea de que Marte podría convertirse algún día en el hogar de una metrópolis y -potencialmente- en un destino turístico es reconocida por científicos de la corriente dominante como Meyer, el principal experto en Marte de la NASA.
Meyer cuenta que, hace 20 años, asistió a una presentación sobre negocios y turismo en Marte. "Fui bastante escéptico al respecto... y al salir pensé: 'Bueno, [hay] algunas ideas bastante razonables", dijo, añadiendo que ahora acepta la idea de que los empresarios podrían hacer más accesibles los viajes espaciales.
Meyer añadió que, en su opinión, no se trata de si los viajes a Marte serán algún día rentables, sino de cuándo.
Musk no ha ampliado sus ideas para ganar dinero en Marte, pero sus reflexiones sobre la exportación de la propiedad intelectual se hicieron eco de un libro escrito por Robert Zubrin, una figura influyente pero polarizadora en la comunidad espacial y un viejo aliado de Musk.
"Las ideas pueden ser otra posible exportación para los colonos marcianos", escribió Zubrin, que dirige la Mars Society, en su muy citado libro de 1996, "The Case for Mars".
Para mirar hacia un posible futuro de la humanidad, Zubrin se fija en su pasado.
"Al igual que la escasez de mano de obra imperante en la América colonial y del siglo XIX impulsó la creación de la avalancha de inventos del ingenio yanqui, las condiciones de extrema escasez de mano de obra... tenderán a impulsar el ingenio marciano".
En una entrevista reciente con CNN Business, Zubrin defendió esas ideas, argumentando que la colonización estadounidense ha funcionado. Zubrin vuelve a recordar la colonización de Norteamérica como ejemplo de cómo podrían financiar su viaje los futuros colonos de Marte.
"Si dices, vale, quieres ir a Marte, vas a querer ofrecer algo", dijo Zubrin. "Si nos fijamos en la América colonial, una persona de clase media podría viajar a América liquidando su granja. Pero, los ingresos les darían un billete de ida. Pero si trabaja, lo que podría hacer es vender su mano de obra durante siete años. ¿Recuerdas a los sirvientes contratados?"
"Así que habrá alguna selección para, ya sabes, si puedes pagarlo, puedes irte en tus propios términos - pero si no puedes... efectivamente son como 300.000 dólares que es más o menos lo que una persona trabajadora puede ganar en siete años, o lo que una persona de clase media puede reunir vendiendo su casa", añadió Zubrin.
Zubrin, que ha trabajado con grupos de reflexión conservadores pero dice no estar afiliado políticamente, también reconoció que la colonización puede ir de la mano de la explotación: "Si alguien dice: '¿Pero no habrá explotación allí? Pues claro, eso es lo que se hace la gente todo el tiempo".
(Musk no ha expuesto sus ideas sobre el colonialismo, y hace donaciones a los dos partidos políticos estadounidenses).
Para que quede claro: la historia del colonialismo estadounidense también incluyó la esclavitud y la brutalización y eliminación de muchas poblaciones nativas.
"No hay marcianos nativos", dijo Zubrin.
Pero Damien Williams -profesor y estudiante de doctorado en Virginia Tech que estudia la intersección de las tecnologías avanzadas, la ética y las sociedades- advierte que las historias que podemos contarnos a nosotros mismos sobre Estados Unidos y la exploración del espacio exterior pueden dejar fuera un contexto clave.
Todavía no está claro, por ejemplo, quiénes son los primeros colonos de Marte que Musk imagina. ¿Astronautas de la NASA? ¿Buscadores de emociones fuertes? ¿Empleados de SpaceX?
"Esta postura competitiva de expansión y exploración no es necesariamente mala", afirma Williams, que también trabaja con el grupo Just Space Alliance. Pero, cuando se trata de una empresa privada que utiliza recursos que, según los tratados internacionales, no pertenecen a nadie, "¿a quién se ha traído y cómo? ¿A quién se ha dejado fuera y por qué? Estas cosas importan".
El uso que Musk hace de la palabra "colonización" también contradice una larga historia en la que los estadounidenses y otras naciones occidentales se enriquecen explotando y esclavizando a otros. Y cuando se trata de colonizar otro planeta, no sólo hay que preocuparse por las formas de vida microbiana que puedan existir en Marte. Sin objetivos y acuerdos claramente definidos, la colonia de SpaceX podría crear una "esfera contenciosa de conflicto", dijo Williams.
"Los valores que llevamos con nosotros a la exploración espacial deben estar en primer plano", añadió.
SpaceX no respondió a las solicitudes de comentarios para este artículo.
Actualización: Este artículo se ha actualizado con citas adicionales de Robert Zubrin sobre cómo podrían pagar su viaje los colonos de Marte.
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Fuente: edition.cnn.com